SE NECESITAN MÁS SACERDOTES PARA NUESTRA IGLESIA.-

Muy querido Pueblo de la Arquidiócesis de Los Angeles:

Hoy nuestra Arquidiócesis, como tantas otras en nuestra nación, tiene menos sacerdotes para servir a más católicos. Todos nosotros –obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos- compartimos la grave responsabilidad de que en nuestras parroquias continúen ambos, el ministerio y el liderazgo pastoral.

Tenemos que hacer de la oración y de la promoción de las vocaciones sacerdotales una muy alta prioridad en todas nuestras parroquias, y durante este Año de Oración por las Vocaciones Sacerdotales, hemos de intensificar nuestra oración y nuestros esfuerzos. Y, con todo, hemos de reconocer el hecho de que aún con más vocaciones al sacerdocio, se necesitarán varios años antes de que estos hombres estén listos para ser ordenados. Entretando, mirando la realidad de clases más pequeñas de ordenandos en los años recientes, y con más sacerdotes envejeciendo y jubilándose, tenemos que empezar a planificar cómo somos capaces de proveer el mejor liderazgo pastoral en cada parroquia.

Estoy pidiendo que cada parroquia de la Arquidiócesis, desde ahora hasta finales de junio del 2006, lleve a cabo un estudio de su propia realidad preguntándose esta cuestión importante: Con la probabilidad de que las parroquias de nuestra Arquidiócesis tendrán menos sacerdotes en los próximos años, ¿cómo proveerá nuestra parroquia su ministerio y su liderazgo pastoral? ¿Qué modelo de liderazgo pastoral sería el mejor para nuestra parroquia si no tuviera ya un sacerdote residente?

Es esencial que cada comunidad parroquial lleve seriamente a cabo este estudio y que ustedes completen esta tarea en el próximo mes de junio. Esto nos capacitará para enfrentarnos a este desafío con planes firmes para el ministerio y el liderazgo pastoral.

Al empezar un nuevo Año Litúrgico en este primer domingo de Adviento, quiero que estén seguros de mi propia oración y de mi ayuda por todos ustedes al caminar hacia delante bajo la guía del Espíritu Santo y planificar juntos nuestro futuro. VN

Su Eminencia

Cardenal Rogelio M. Mahony

Arzobispo de Los Angeles