PEQUEÑO JESÚS: ‘POBRES AYUDANDO A POBRES’

Voluntarios generosos contribuyen en Apostolado de Radio Guadalupe

La foto habla por sí sola. Una pequeña niña con un delgado mechón de cabello peinado en una trenza que cae sobre su rostro enmarcado por su cabello despeinado parece como una muñeca en los brazos de una adolescente que la carga.

Es domingo 12 de enero, 2014, y ambas niñas hacen fila en una calle de la localidad de Maneadero, Ensenada, Baja California (México) para recibir juguetes en ocasión del Día de Reyes (celebrado cada 6 de enero). Al indagar, los voluntarios del Apostolado Pequeño Jesús de Radio Guadalupe/Hombre Nuevo, con sede en El Monte, que repartían juguetes y otros artículos, se dan cuenta que la adolescente es una joven madre que ha llegado de lejos para recibir los regalos que ella no le pudo ofrecer a su pequeña durante la Navidad.

“Muchos beneficios,” dijo la Hermana de Santa Clara, María Eugenia Ponce, sobre el apostolado que ha estado colaborando desde hace 10 años con el Convento de Clarisas en el Fraccionamiento Maneadero al que pertenece, para llevar un poco de alegría a los habitantes de la comunidad que viven muy por debajo de los límites de pobreza en ese país vecino.

“(Las personas) están esperando alguna cosa para su sustento: ropa, comida, juguetes”, continúa la Hermana María Eugenia. Aunque las tierras en esa área son casi desérticas, algunos de los tres mil habitantes se dedican a la agricultura a muy baja escala.

El apostolado “Pequeño Jesús” es una obra caritativa y misionera iniciada hace 20 años bajo la tutela del Padre de la Legión de Cristo, Juan Rivas, respondiendo a la carencia existente en zonas marginadas de Baja California. En noviembre de cada año inicia la campaña radial y televisiva invitando a católicos y no católicos a contribuir con cobijas, alimentos y juguetes para entregar a familias necesitadas y así festejar el Día de Reyes. La ocasión también sirve para hablar a las familias sobre la importancia de sostener y desarrollar su propia fe.

Más de 600 automóviles con al menos cuatro personas cada uno cruzaron la frontera el domingo 12 de enero para entregar los artículos a más de tres mil personas en Tijuana, Tecate, Rosarito, Ensenada y Mexicali. Aproximadamente 200 voluntarios permanentes trabajan arduamente durante noviembre y diciembre para clasificar los artículos donados. Se pide que sea comida duradera como granos (frijoles, arroz), ropa, juguetes y cobijas nuevas. (Este año se repartieron más de tres mil cobijas.) También se acepta ayuda monetaria.

“Uno ve la necesidad de la gente,” dijo Ruth Yolanda Sida, gerente de librerías de Radio Guadalupe/Hombre Nuevo, quien encontró al Convento de las Clarisas de una manera fortuita hace 10 años cuando con su esposo perdieron de vista la caravana de Pequeño Jesús que se dirigía a repartir cobijas, juguetes y alimentos a otra área de Baja California.

Entre otras anécdotas, recuerda cuando un niño prefirió una bolsa de frijoles que un juguete o cuando una niña de 14 años de edad que llevaba en sus brazos a un bebé y estaba rodeada de dos niños pequeños respondió que ella era la madre de todos esos niños al preguntársele por la madre de todos.

“Tú das algo material y regresas con algo más espiritual, más profundo”, dijo a VIDA NUEVA Juan Carlos Jiménez, coordinador de ministerios de Radio Guadalupe/Hombre Nuevo.
La actividad ayuda mucho a valorar las cosas materiales que se tienen, concordaron los voluntarios Moisés Vázquez, Jorge Luis Carmona, Lupe Moreno y Adriana Luna.

Vázquez no pudo contener las lágrimas y con voz entrecortada y sin poder encontrar las palabras exactas expresó su júbilo al estar ayudando voluntariamente en el apostolado llevando paquetes y despensas a Refugio de Amor, un centro de atención para enfermos mentales en Mexicali, de donde él es originario.

Algunos de los voluntarios conocieron sobre el apostolado Pequeño Jesús a través de la Escuela de Fe de Radio Guadalupe, o cuando mientras iban en su automóvil a trabajar, estaban cambiando de canales de radio y de repente escucharon sobre el exitoso proyecto que sirve a las comunidades más necesitadas del país vecino y de donde muchos de los voluntarios son originarios.

“Esto es un ejercicio de la fe”, dijo el sacerdote Nivardo Quezada, Legionario de Cristo, director ejecutivo de Radio Guadalupe/Hombre Nuevo. “Estas personas (los voluntarios) no son ricos, pero ellos dan porque a ellos Dios les ha dado mucho cuando también tuvieron necesidad. Esto es sobre pobres que ayudan a pobres”. VN

Para más información sobre el apostolado Pequeño Jesús comunicarse con Frances Guerrero, fguerrero@guadaluperadio.com o llamar al (626)444-4442, extensión 139 o en Facebook, Campaña Pequeño Jesús 2014.

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