NOTICIAS BREVES DEL MES DE OCTUBRE, 2011

EL PAPA PIDE QUE SE RECE EN OCTUBRE POR LOS ENFERMOS TERMINALES

CIUDAD DEL VATICANO, (ZENIT.org).- En el mes de octubre que acaba de empezar, el Papa Benedicto XVI pide a los fieles que recen por los enfermos terminales.

Es la propuesta que dirige en las intenciones contenidas en la carta pontificia que ha confiado al Apostolado de la Oración, iniciativa seguida en todo el mundo por casi 50 millones de personas.
El Pontífice confía cada mes dos intenciones de oración, una general y otra misionera.

La general del mes de octubre dice: “Por los enfermos terminales, para que en sus sufrimientos sean sostenidos por la fe en Dios y el amor de sus hermanos”.

La intención misionera dice así: “Para que la celebración de la Jornada Misionera Mundial acreciente en el Pueblo de Dios la pasión por la evangelización y el apoyo a la actividad misionera con la oración y la ayuda económica a las Iglesias más pobres”.

EX BRACEROS DEL SUR DE CALIFORNIA PROTESTAN Y PIDEN INTERVENCIÓN

LOS ÁNGELES, (EFE).- Un grupo de ex braceros protestó frente al Consulado de México en los Ángeles, y entregó una carta dirigida al presidente Felipe Calderón denunciando las trabas en EE.UU en los trámites para recuperar el dinero que se les adeuda.

Cerca de 100 personas se reunieron frente a la sede consular para manifestar una vez más por la entrega de la ayuda que el Gobierno mexicano les ofrece en compensación por los pagos que les fueron descontados mientras trabajaban en EE.UU entre 1942 y 1964.

“Una vez más estamos pidiendo justicia, a ver si ahora sí nos oyen”, reclamó Marco Buitrago, unos de los ex braceros que acudió a la sede del consulado.

“No pedimos sino lo que es nuestro, no es una limosna ni un regalo, es el dinero que nos quitaron cuando trabajábamos”, argumentó este ex trabajador que a los 72 años sufre de diabetes y otros problemas de salud.

Los braceros o sus familiares, pues algunos de ellos ya fallecieron, llevaron una carta dirigida al presidente de México, Felipe Calderón, al Congreso mexicano y al presidente de EE.UU Barack Obama, donde se pide que les solucionen la entrega del subsidio a quienes residen en Estados Unidos.

Durante la duración del Programa Bracero -un permiso dado a obreros y campesinos mexicanos para suplir la falta de mano de obra estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial- el gobierno de México dedujo un 10 % de cada pago de salario para reservarlo en el Fondo de Ahorro Campesino.

Estos ahorros se entregarían a los trabajadores mexicanos al regresar a su patria.

Sin embargo, esta entrega nunca se realizó, y sólo después de que los trabajadores establecieron una demanda, el Gobierno mexicano accedió a pagar 38,000 pesos mexicanos -alrededor de 3,200 dólares- a cada ex bracero.

“Sin embargo, el registro para recibir este dinero para quienes vivían en Estados Unidos, se realizó en los consulados mexicanos y muchos no pudieron o no supieron cómo completarlo, por lo que miles de ellos quedaron por fuera”, señaló Macías.

Según señaló Macías, “los consulados mexicanos se utilizaron para reclutar incautos para una demanda de clase donde el gobierno mexicano y un grupo de abogados, negociaron el fraude contra los braceros de 1942/1946”.

Según la activista, no existe ninguna publicación en el diario oficial del gobierno mexicano donde se autorice a los consulados a recibir documentación sobre el caso.

Entre las quejas que presentan los ex braceros que no pudieron registrarse, figuran desde el rechazo a ciertos documentos de identificación hasta la mala atención y el trato discriminatorio que se ofreció a muchos de ellos en varias oficinas consulares.

La Secretaría de Gobierno de México dio a conocer a mediados de agosto, la lista de más de 5,000 ex trabajadores beneficiarios del fideicomiso 2106 -registrados en los consulados de México en EE.UU- que recibirán el pago de los 38 mil pesos.

LA EXPLOTACIÓN INFANTIL ES AÚN UN PROBLEMA EN GRAN PARTE DE AMÉRICA LATINA

WASHINGTON.- La explotación infantil es aún un problema en 71 países del mundo, entre ellos varios latinoamericanos, según tres informes que presentó la secretaria de Trabajo de Estados Unidos, Hilda Solís.

Entre los países que aparecen en los informes se encuentran Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras y Perú.

Según los datos proporcionados por el Departamento de Trabajo, el empleo infantil continúa siendo mano de obra para la fabricación de más de una decena de productos diferentes.

La agricultura y la minería son los sectores que más se surten del trabajo infantil en los países de América Latina, seguidos por la pornografía, apuntan los estudios.

Los estudios arrojan una visión detallada de la realidad del trabajo infantil y forzoso alrededor del mundo, situación contra la que Estados Unidos pretende luchar apoyando varios proyectos con una suma de 32.5 millones de dólares, anunció Solís.

“Estos informes dan una visión de los esfuerzos internacionales que se están haciendo para proteger a los niños de trabajos peligrosos, e identifican las debilidades políticas y de ejecución que los hacen más vulnerables”, dijo Solís durante la presentación.

La secretaria de Trabajo estadounidense explicó que, a través de una mayor educación y concientización, así como mediante la asistencia a familias y gobiernos, “se puede lograr que la explotación infantil sea cosa del pasado”.

Los resultados de “Worst Forms of Child Labor” (Las peores formas de trabajo infantil) contienen perfiles pormenorizados sobre 140 países donde los niños practican trabajos peligrosos.

Además, el estudio recoge las principales conclusiones sobre los esfuerzos de cada gobierno central para hacer frente a este tipo de abuso, las lagunas legislativas al respecto y las acciones propuestas por cada país para mejorar las respectivas políticas.

El segundo de los informes presentados por el Departamento de Trabajo, la Lista de Bienes Producidos mediante Trabajo Infantil o Trabajo Forzado, reveló que el número de productos facturados bajo este tipo de circunstancias alcanza los 130 y los países que los producen son 71.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) calcula que unos 12.3 millones de personas practican trabajos forzados en todo el mundo y que 215 millones de niños son trabajadores, de los cuales 115 millones lo son en condiciones de riesgo, informó el Departamento de Trabajo.

ESCRITOR PROMUEVE APORTES DE MEXICOAMERICANOS EN LOS ÁNGELES

LOS ÁNGELES.- El escritor Alex Moreno Areyan critica que en los medios en inglés no se destacan los aportes de los hispanos a EE.UU, por ello promueve su libro “Mexican Americans in Los Angeles”, en el que narra historias de latinos exitosos.

“El libro es un relato con fotografías de la historia de éxitos y contribuciones de los mexicoamericanos que se han distinguido en Los Ángeles en los pasados 100 años”, dijo Moreno Areyan.

“El libro tiene ocho capítulos y comienza con los que han destacado en cine como Dolores del Río, Lupe Vélez y Ricardo Montalbán, entre otros; además de los que han destacado en los deportes, entre ellos el boxeador Oscar de la Hoya y veteranos de la Segunda Guerra Mundial”, agregó.

Publicado en abril de 2010 por la editorial Arcadia con sede en San Francisco, California, el libro ‘Images of America: Mexican American in Los Angeles” tiene en su portada una fotografía de 1949 del mexicoamericano Edward E. Roybal caminando junto a su esposa Lucille en el centro de Los Ángeles.

La imagen corresponde a los momentos en que el político se encontraba en campaña para competir por el puesto de concejal de la ciudad de Los Ángeles, que ganó, y así retomó la posición que no había sido ejercida por un mexicoamericano desde 1881.

Moreno Areyan contó que para el libro dedicó 15 meses de trabajo de 20 horas al día, y que el mismo surgió después de que en 2007 publicara su primer libro sobre los mexicoamericanos en Redondo Beach y Hermosa Beach, “de los que se han vendido 5,000 copias”.

“La editorial me pidió que hiciera el mismo trabajo; pero solamente con mexicoamericanos de Los Ángeles, y lo primero que les dije es que no, porque hay tanta historia que iba a tener que escribir unos veinte libros y no pensaba yo que podía vivir tantos años para escribir esa historia”, indicó.

El primer libro de historia mexicoamericana de Redondo Beach y Hermosa Beach surgió a partir de fotografías e historias que le contaba su abuelo, Domingo Moreno, quien proveniente de Michoacán, México, llegó a la ciudad de Hermosa Beach en 1910.

“En el proceso de investigación solamente me fui a buscar a los hijos y nietos de los amigos de mi abuelo de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe y así encontré las fotos históricas”, reveló el escritor.

“En el de los mexicoamericanos en Los Ángeles busqué información en internet sobre algunos de los más destacados, envié correos electrónicos y así logré hacer las entrevistas y obtener permiso para publicar las fotos históricas”, recordó.

Nacido el 8 de julio de 1941 en Hermosa Beach, California, Alejandro Moreno Arellano es hijo de un inmigrante mexicano, quien llegó a EE.UU en 1924 y de madre mexicoamericana nacida en Los Ángeles.

“Mis padres eran campesinos que trabajaban en una finca de rancheros japoneses en Gardena”, relató Moreno Areyan, el menor de 7 hermanos, quienes junto a la familia trabajaban en el campo.

“Yo soy el único que sin becas estudió la licenciatura en Ciencias Políticas, graduado en 1969 de la Universidad Estatal de Long Beach y Maestría en Sicología de Organizaciones Industriales (1987) de la Universidad de San Francisco, de sacerdotes jesuitas”, contó.

El escritor dijo que la tirada de la obra “Mexican Americans in Los Angeles” es de dos mil ejemplares y por cada libro vendido la editorial le paga 1 dólar.

“Quiero dejar un legado histórico que espero que motive a otras comunidades como los salvadoreños y puertorriqueños para que escriban su historia en EE.UU”, dijo el escritor, quien trabajó 30 años en recursos humanos para las empresas aeroespaciales Boeing y Northrop Grumman.

“Escribir es un trabajo duro, y con esto lo que quiero es contribuir a corregir la imagen negativa que vemos a diario en los medios en las que los latinos aparecen solamente arrestados o en la cárcel”, aseguró Moreno Areyan.

“Lo que quiero decir con este libro es: ‘mira, existe otro lado de tu historia negativa en que los latinos hacen cosas buenas’”, finalizó. VN

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