MONSEÑOR RESUCITA ENTRE LOS SALVADOREÑOS AL DEVELARSE SU PRIMERA ESTATUA EN LOS ÁNGELES

‘He estado amenazado de muerte frecuentemente. He de decirles que como cristiano no creo en la muerte sin resurrección: si me matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño’

Citando algunas de sus principales frases de sus últimas homilías, dando vivas y recordado su legado, más de un centenar de personas se congregaban alrededor de la estatua de bronce esculpida por el artista salvadoreño Joaquín Guaco Serrano, el pasado 24 de noviembre en las calles 7th y Alvarado del Parque Mac Arthur.

“Ahora que tenemos la presencia de Monseñor Oscar Romero en la ciudad de Los Ángeles donde se concentra la mayor población latina en los Estados Unidos, le voy a pedir que interceda a Dios por una Reforma Migratoria”, dijo el Arzobispo de Los Ángeles José Gomez, luego de develar junto a las autoridades de la ciudad y líderes comunitarios, la primera estatua en Estados Unidos del obispo mártir salvadoreño.

“Yo creo que su presencia y su recuerdo aquí -Parque Mac Arthur en Los Ángeles- será de inspiración para todos nosotros para que de verdad busquemos la paz y llevemos a la práctica las enseñanzas del Evangelio”, prosiguió el Arzobispo Gomez, quien estuvo atento a las palabras de admiración de parte de personalidades como el Alcalde Erick Garcetti, el Senador estatal Kevin de León, el concejal Gil Cedillo, entre otros, previo a la develación de la estatua.

“Es una gran alegría tener una estatua de Monseñor Romero por lo que él significa para todos los latinos y especialmente para los salvadoreños, pero para la Iglesia también porque él siempre con su ejemplo de vida nos enseñó cómo ser fieles a las enseñanzas del Evangelio y buscar la paz y justicia para hacer un mundo mejor”, añadió.

Asimismo, el Arzobispo Gomez puntualizó que ésta es un área donde se nota la presencia de los salvadoreños de todos Los Ángeles, y un lugar público para que la gente lo visite; para que la familia se reúna, los niños jueguen y tengan siempre presente las enseñanzas de Monseñor Romero.

¿Cuál es el contexto actual del mensaje de Monseñor Romero hacia nuestra comunidad?, preguntó VIDA NUEVA al líder católico. “Primero que nada su santidad de vida, su fidelidad a las enseñanzas de la Iglesia, y al mismo tiempo, su compromiso con todos los salvadoreños y todos aquéllos con alguna necesidad, y especialmente su promoción de la paz, justicia y del amor hacia todos”, respondió.

“Monseñor Romero continúa acompañando a su pueblo en una lucha que ahora es la Reforma Migratoria para obtener la dignidad como seres humanos. Su compromiso con los pobres y con los necesitados y con la justicia es de inspiración para todos los inmigrantes en Estados Unidos. Él es un Santo que nos acompaña y a quien debemos pedirle que muy pronto se haga realidad la Reforma Migratoria”, recalcó el Arzobispo Gomez.

‘CON MONSEÑOR ROMERO DIOS PASÓ POR LOS ÁNGELES…’

Por su parte, Carlos Vaquerano, director ejecutivo del Fondo Salvadoreño-Americano para el Liderazgo y la Educación (SALEF), organización que lideró el proyecto de la Plaza Memorial, expresó: “Monseñor [Romero] fue una persona de fe que luchó por los pobres; estuvo convencido de que iba a morir por los pobres y así fue. Debemos seguir ese ejemplo de lucha y perseverancia, de trabajar por los desposeídos”, dijo
“Es un día histórico poder tener presente a Monseñor Romero acá con nosotros, aunque obviamente también es un compromiso para poder seguir su ejemplo de fe, lucha, perseverancia, amor para los pobres; tenemos que continuar esa lucha porque aún hay injusticias, y también es una oportunidad para continuar pidiendo su beatificación”.

“Esta plaza será consagrada para recordarlo y también para hacer actividades comunitarias, religiosas y para enseñarles a los niños quién fue este personaje, sus enseñanzas de lucha de paz y amor”, enfatizó Vaquerano.

“Creo que es muy significativo para los salvadoreños que la ciudad de Los Ángeles esté otorgando un lugar como el Parque Mac Arthur para que repose Monseñor Romero, la ciudad que alberga al segundo grupo más grande de salvadoreños fuera del país”, agregó Vaquerano.

El director ejecutivo de SALEF también declaró que la Arquidiócesis de Los Ángeles estuvo apoyando a través del Arzobispo José Gomez para que la Plaza Memorial se hiciera realidad después de estar gestionándola por más de 10 años. Asimismo brindaron apoyo el acalde Erick Garcetti, la oficina del Concejal Gil Cedillo y el anterior concejal del D 1 Ed Reyes. Por su parte, la Agencia de Reurbanización de California (CRA) facilitó $100 mil para la construcción de la plaza y estatua. “Ahora nosotros esperamos seguir trabajando para que esta plaza se mantenga viva”, puntualizó.

“Los salvadoreños residentes en Los Ángeles debemos sentirnos orgullosos porque han tomado en cuenta a una personalidad tan sobresaliente como Monseñor Romero y, hacer una estatua en un parque tan concurrido como el Mac Arthur, efectivamente es un reconocimiento hacia la comunidad salvadoreña”, comentó Romeo Escobar, un reconocido líder comunitario salvadoreño.

“El monumento a Monseñor Romero es una reflexión a la aportación de toda la historia del pueblo salvadoreño y de la humanidad. Esa aportación no tiene fronteras, y ponerlo aquí en este parque refleja la importancia de esa especial contribución, y una inspiración a la continua lucha de la comunidad salvadoreña”, comentó el doctor Raúl Hinojosa-Ojeda, profesor asociado en el Departamento de Estudios Chicanos de UCLA.

“Para el gobierno y la comunidad salvadoreña el acto de develación de la estatua de Monseñor Romero tiene mucha significación no sólo por la trascendencia de su nombre, sino por el orgullo que nos causa a los salvadoreños que reciba el reconocimiento mundial especialmente en Los Ángeles, la meca del entretenimiento y de la historia de EE.UU.”, dijo Walter Durán, Cónsul General de El Salvador en Los Ángeles.

Que tengamos un espacio para un hijo de El Salvador es para nosotros un gran orgullo, recalcó el diplomático.

“Romero merece estar en el panteón de los grandes como Teresa de Calcuta, Martin Luther King, Mahatma Gandhi, César Chávez de California, el padre Olivares, etc. El Obispo Romero fue un mensajero de paz, luchó por justicia; vive en nuestro corazón e inspira a otras comunidades a seguir luchando por sus derechos”, dijo el Senador estatal de California, Kevin de León.

En tanto el Viceministro de Salvadoreños en el Exterior, Juan José García, recordó al padre Ignacio Ellacuría – asesinado también por el ejército-, quien después del martirio de Oscar Arnulfo Romero, dijo: “Con Monseñor Romero Dios pasó por El Salvador. Podemos decir ahora que este 24 de noviembre al inaugurar esta plaza, ‘Dios pasó por Los Ángeles’”, declaró el funcionario.

Ahora las nuevas generaciones nacidas en Los Ángeles tendrán un símbolo más concreto de Monseñor Romero de quien seguramente sus padres les habrán hablado mucho.

“Monseñor Romero es y será siendo sin duda alguna el salvadoreño más conocido en el mundo. Quizá más conocido en Los Ángeles por ser una de las ciudades más pobladas de salvadoreños en Estados Unidos, y la segunda en el mundo después de San Salvador”, agregó.

“Monseñor Romero tiene respeto mundial y pensamos que podíamos ir más allá logrando hacer algo más simbólico, para que nos ate con el compromiso en este país. Así fue cómo se sembró la idea de una plaza y un monumento en honor de Monseñor Romero, cuya humildad y defensa de los indefensos cautivó al pueblo salvadoreño”, resaltó Vaquerano.

Monseñor Romero fue asesinado en 1980 a los 63 años. Un francotirador le disparó al corazón cuando oficiaba misa, un día después de pedir a los militares en una homilía: “En nombre de Dios y de este sufrido pueblo les ruego, les suplico, les ordeno, en nombre de Dios, cese la represión”.

Su asesinato fue uno de los detonantes de la guerra civil que asoló a El Salvador por 12 años y que terminó con la firma de los acuerdos de paz en 1992. Más de 75 mil personas murieron en el conflicto y otras 12 mil desaparecieron.

Actualmente se está procurando canonizar a Monseñor Romero. El proceso fue aprobado por el Vaticano en mayo de 2005, cuando la Congregación de la Doctrina de la Fe concluyó que Romero fue “un mártir de la Iglesia, asesinado por su fe cristiana”. VN

MONSEÑOR OSCAR ROMERO – FRASES DE HOMILÍAS

* HERMANOS, ¡cómo quisiera yo grabar en el corazón de cada uno esta gran idea: el cristianismo no es un conjunto de verdades que hay que creer, de leyes que hay que cumplir, de prohibiciones! Así resulta muy repugnante. El cristianismo es una persona, que me amó tanto, que me reclama mi amor. El cristianismo es Cristo. (6 de noviembre de 1977).

* QUÉ HERMOSO SERÍA EL DÍA en que cada bautizado comprenda que su profesión, su trabajo, es un trabajo sacerdotal; que, así como yo voy a celebrar la misa en este altar, cada carpintero celebra su misa en su banco de carpintería; cada hojalatero, cada profesional, cada médico con su bisturí, la señora del mercado en su puesto… están haciendo un oficio sacerdotal. Cuántos motoristas sé que escuchan esta palabra allá en sus taxis. Pues tú, querido motorista, junto a tu volante, eres un sacerdote si trabajas con honradez, consagrando a Dios tu taxi, llevando un mensaje de paz y de amor a tus clientes que van en tu carro. (20 de noviembre de 1977).

* UNA RELIGIÓN DE MISA DOMINICAL pero de semanas injustas no le gusta al Señor. Una religión de mucho rezo pero con hipocresías en el corazón, no es cristiana. Una Iglesia que se instalara sólo para estar bien, para tener mucho dinero, mucha comodidad, pero que olvidara el reclamo de las injusticias, no sería la verdadera Iglesia de nuestro divino Redentor. (4 de diciembre de 1977).

* AUN CUANDO SE NOS LLAME LOCOS, aun cuando se nos llame subversivos, comunistas y todos los calificativos que se nos dicen, sabemos que no hacemos más que predicar el testimonio subversivo de las bienaventuranzas, que le han dado vuelta a todo para proclamar bienaventurados a los pobres, bienaventurados a los sedientos de justicia, bienaventurados a los que sufren. (11 de mayo de 1978).

* MUCHOS QUISIERAN QUE EL POBRE siempre dijera que es “voluntad de Dios ” vivir pobre. No es voluntad de Dios que unos tengan todo y otros no tengan nada. No puede ser de Dios. De Dios es la voluntad de que todos sus hijos sean felices. (10 de septiembre de 1978).

* CUANDO SE LE DA PAN AL QUE TIENE HAMBRE lo llaman a uno Santo, pero si se pregunta por las causas de por qué el pueblo tiene hambre, “lo llaman comunista, ateísta”. Pero hay un “ateísmo” más cercano y peligroso para nuestra Iglesia: el ateísmo del CAPITALISMO, cuando los bienes materiales se erigen en ídolos y sustituyen a Dios. (15 de septiembre de 1978).

* UNA IGLESIA QUE NO SUFRE PERSECUCIÓN, sino que está disfrutando los privilegios y el apoyo de la burguesía, no es la verdadera Iglesia de Jesucristo. (11 de marzo de 1979).

* ¡CUÁNTOS HAY QUE MEJOR NO DIJERAN que son cristianos, porque no tienen fe…! Tienen más fe en su dinero y en sus cosas, que en el Dios, que construyó las cosas y el dinero. (3 de junio de 1979).

* ¿DE QUÉ SIRVEN HERMOSAS CARRETERAS Y AEROPUERTOS, hermosos edificios de grandes pisos, si no están más que amasados con sangre de pobres que no los van a disfrutar? (15 de julio de 1979).

* NO NOS CANSEMOS DE DENUNCIAR LA IDOLATRÍA DE LA RIQUEZA, que hace consistir la verdadera grandeza del hombre en tener, y olvida que la verdadera grandeza es “ser”. No vale el hombre por lo que tiene, sino por lo que es. (4 de noviembre de 1979).

* HABRÍA QUE BUSCAR AL NIÑO JESÚS, no en las imágenes bonitas de nuestros pesebres. Habría que buscarlo entre los niños desnutridos que se han acostado esta noche sin tener qué comer, entre los pobrecitos vendedores de periódicos que dormirán arropados de diarios allá en los portales. (24 de diciembre de 1979).

* ¡QUÉ HERMOSO SERÁ EL DÍA EN QUE UNA SOCIEDAD NUEVA, en vez de almacenar y guardar egoístamente, se reparta, se comparta y se divida, y se alegren todos, porque todos nos sentimos hijos del mismo Dios! ¿Qué otra cosa quiere la palabra de Dios en este ambiente salvadoreño sino la conversión de todos para que nos sintamos hermanos? (27 de enero de 1980).

* NO ES UN PRESTIGIO PARA LA IGLESIA ESTAR A BIEN CON LOS PODEROSOS. Éste es el prestigio de la Iglesia: sentir que los pobres la sienten como suya, sentir que la Iglesia vive una dimensión en la tierra, llamando a todos, también a los ricos, a convertirse y salvarse desde el mundo de los pobres, porque ellos son únicamente los bienaventurados. (17 de febrero de 1980).

* HE ESTADO AMENAZADO DE MUERTE FRECUENTEMENTE. He de decirles que como cristiano no creo en la muerte sin resurrección: si me matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño. Lo digo sin ninguna jactancia, con gran humildad. Si llegasen a cumplirse las amenazas, desde ahora ofrezco a Dios mi sangre por la redención y por la resurrección de El Salvador. El martirio es una gracia de Dios, que no creo merecer. Pero si Dios acepta el sacrificio de mi vida, que mi sangre sea semilla de libertad y la señal de que la esperanza pronto será una realidad. Mi muerte, si es aceptada por Dios, sea para la liberación de mi pueblo y como un testimonio de esperanza en el futuro. Puede decir usted, si llegan a matarme, que perdono y bendigo a aquellos que lo hagan. De esta manera se convencerán que pierden su tiempo. Un obispo morirá, pero la Iglesia de Dios, que es el Pueblo, nunca perecerá. (Marzo de 1980).