DISMINUYEN REPATRIACIONES A MÉXICO DE MENORES INDOCUMENTADOS QUE VIAJAN SOLOS

El número de menores que viajan solos y que fueron repatriados a México por la frontera El Paso-Ciudad Juárez ha disminuido en un 44 por ciento con respecto a 2008, de acuerdo con el Consulado General de México en El Paso.

El portavoz de la representación mexicana en El Paso, Luis Adrián Sosa, indicó hoy que por primera vez en una década ha disminuido el flujo de menores mexicanos que llegan sin sus padres a la frontera para intentar el cruce indocumentado y que son interceptados y repatriados por la Patrulla Fronteriza.

Sosa detalló que en tanto que en 2008 fueron repatriados por este sector 1.297 menores, un promedio de 108 al mes, en los primeros seis meses de 2009 la cifra es de 304, con una media mensual de 50, lo que representa una merma aproximada del 50 por ciento.

“La disminución en el número de menores repatriados a México es equivalente a la disminución de detenciones en general de inmigrantes indocumentados en la frontera suroeste del país”, dijo a Efe el portavoz de la Patrulla Fronteriza, Douglas Mosier.

Estadísticas de la agencia federal muestran que del año 2005 a la fecha ha bajado dramáticamente el número de arrestos de inmigrantes, y que mientras hasta hace cuatro años la cifra superaba el millón, en el año fiscal 2008 (1 de octubre de 2007 a 30 de septiembre de 2008), fue de 724.000.

Mosier expuso que esta disminución puede deberse tanto a una mayor presencia de agentes a lo largo de la frontera, como a las actuales condiciones económicas.

Sosa expuso que la mayoría de los menores sin compañía detenidos en El Paso son residentes de Ciudad Juárez, pero hay otros que vienen del interior de México con edades entre los 4 y los 17 años.

Los menores detenidos por las autoridades migratorias de Estados Unidos son entrevistados por personal del Consulado mexicano para asegurarse de que no hayan sufrido abusos o tengan necesidades especiales.

La mayoría de los menores declararon haberse internado en Estados Unidos a trabajar, o bien a reunirse con el padre o la madre que previamente habían migrado a Estados Unidos.

“Cuando son detenidos, las autoridades migratorias nos comunican que tienen al menor”, sostuvo el portavoz del Consulado, quien precisó que posteriormente, las autoridades estadounidenses entregan a los jóvenes a representantes del Instituto Mexicano de Migración.

En caso de no tener residencia en una ciudad fronteriza mexicana, el menor queda bajo custodia de Desarrollo Integral de la Familia, cuyo personal se encarga de ponerse en contacto con los familiares y enviarlo de regreso a sus ciudades de origen.

En el caso de los centroamericanos, éstos son colocados en albergues en EEUU, en tanto se resuelve si permanecen en el país o son deportados. VN