CAMPESINOS DE IMMOKALEE ENCUENTRAN EN CENTRO COMUNITARIO UNA VENTANA AL MUNDO

Cuando termina la temporada de cosecha, Immokalee parece un pueblo fantasma, sin embargo, los campesinos encuentran durante el caluroso verano una ventana al mundo a través de los servicios que ofrece su nuevo centro comunitario.

Ubicado en el corazón de esta ciudad de calles polvorientas, ranchos de ganado e interminables siembras de tomates, pepinos y melones, el nuevo centro es un enlace vital entre los familiares que quedaron atrás, el terruño y la búsqueda de una vida mejor, según Lucas Benitez, coordinador de la Coalición de Trabajadores de Immokalee (CIW, en inglés).

“Este centro es un bastión desde donde podemos continuar con nuestras peleas por lograr dignidad y justicia en los campos para nuestros trabajadores”, dijo el líder campesino.

Además de una cooperativa de alimentos, donde los campesinos pueden comprar la canasta familiar a bajo costo, el centro cuenta también con un salón de clases, una biblioteca, y un huerto en el que los campesinos siembran -sin estar expuestos a dañinos pesticidas- sus propios vegetales.

Con pocos lugares para distraerse durante las largas noches del verano, cuando el trabajo es escaso y la cosecha ha terminado, los trabajadores agrícolas han encontrado también en el centro un espacio para la diversión.

“En Immokalee no contamos con salas de cine ni teatros, así que la Coalición renta las últimas películas en Walmart y las presenta gratis a través de una pantalla gigante en el salón principal (con capacidad para 170 personas) donde toda la familia disfruta la ocasión”, dijo Benitez.

Para jóvenes jornaleros como Adalberto Soriano, lo mejor del centro comunitario son las computadoras con acceso a Internet.

“Vengo todos los días y me comunico con mis primos, familiares y amigos en México”, dijo a Efe el inmigrante mexicano de 18 años y quien hace sólo unos meses cruzó la frontera para reunirse con sus padres, jornaleros en Immokalee.

Soriano, quien planea terminar la escuela secundaria en Immokalee, también aprovecha para aprender inglés.

“No sé inglés, pero aquí lo aprendo, en la computadora y las clases que nos dan”, aseguró el muchacho, quien sueña con convertirse en maestro.

Pintado en colores alegres, el centro es la realización de un sueño largamente acariciado por los miembros de la Coalición de Trabajadores que comenzó en 2004 gracias a las generosas donaciones recibidas por parte de organizaciones no lucrativas e iglesias, con las que pudieron dar un adelanto para el terreno donde hoy se levanta el edificio de una planta, cuya ubicación es clave.

“Es importante este punto porque todos pueden tener acceso en cualquier momento, ya que todos los días, especialmente durante la temporada de cosechas -de septiembre a mayo- miles de campesinos se reúnen en el área desde donde abordan los autobuses que los lleva hacía las fincas de cultivos donde trabajan”, dijo Benitez.

Con su nuevo espacio, la CIW ahora tiene la habilitad de convocar a reuniones más grande, y ampliar sus trabajos comunitarios, asegura el líder campesino.

“Tenemos capacidad para el doble de personas que anteriormente podíamos reunir en lugares alquilados, alrededor de 170; hacemos una reunión a la semana, cada miércoles, en las que discutimos nuestros proyectos y además, ahora nuestra estación de radio, Radio Conciencia, dejó de ser ambulante, ya que cuenta con su propia cabina en el mismo edificio”, manifestó con orgullo.

Con todo y los beneficios sociales que ofrece el centro, donde también funcionan otros grupos comunitarios como la Alianza Entre Estudiantes y Jornaleros, lo más importante es que permite tener una oficina dedicada especialmente a combatir la esclavitud y el tráfico humano, asegura Benitez.

“Es un lugar donde podemos, confidencialmente, trabajar para escuchar e identificar a potenciales víctimas de esclavitud y tráfico humano”, dijo.

“Este nuevo centro comunitario también es el lugar donde nos reunimos a buscar solución a nuestros problemas y también donde realizamos reuniones con agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y del Departamento de Justicia, quienes nos ayudan con los casos de esclavitud y tráfico humano que encontramos”, finalizó el dirigente. VN

Share