URUGUAYA COBRA NOTORIEDAD POR DAR CLASES DE TENIS A LAS HIJAS DE OBAMA
La uruguaya Valentina de Yéregui, instructora de tenis de las hijas del presidente electo Barack Obama en un club de Chicago, vive sus 15 minutos de fama por la atención que generan a diario en la prensa estadounidense y mundial las niñas Malia y Sasha.
Periódicos de Argentina, Brasil, España, Italia y su país natal han publicado reportajes sobre Valentina, periodista de formación pero tenista “de alma”, que emigró en el 2006 desde Montevideo para acompañar a su esposo Ignacio, un economista que vino a hacer un curso de post grado en la Universidad de Chicago.
“Todos quieren saber cómo son las niñas, qué tal es la madre Michelle, y lo único que puedo decir es que son gente común”, dijo Valentina, de 28 años.
“Malia y Sasha son niñas dulces, como cualquiera de su edad, y cuyo carácter no ha cambiado por la notoriedad”, agregó.
La relación de las hijas de Obama con la instructora comenzó hace casi un año y medio en las canchas del club de tenis de Hyde Park, el barrio del sur donde vive el presidente electo de los Estados Unidos y donde además está el campus de la Universidad de Chicago.
En esas canchas, el club de tenis Midtown de Chicago, que es el que emplea a Valentina, enseña los rudimentos del “deporte blanco” a alumnos de la Escuela Laboratorio de la Universidad de Chicago, a donde asisten las hijas de Obama.
Valentina de Yéregui es la instructora con mayor cantidad de alumnos con edades de 6 a 12 años, y por esa razón fue la elegida cuando Michelle Obama envió un correo electrónico al club pidiendo una profesora para sus niñas de 8 y 10 años.
“Fue una sorpresa porque entonces Obama era el aspirante a la nominación demócrata y era noticia todos los días”, dijo.
“Pero al mismo tiempo era algo común por tratarse del club de barrio, a donde concurre la gente del barrio”, agregó.
Pero la sorpresa fue mayor cuando, además de Malia y Sasha, también se presentó la madre, interesada en pulir su estilo.
Desde entonces, todos los domingos y durante una hora y media, las hijas practican en una cancha con Valentina, y la madre en otra, bajo la dirección del instructor jefe del club.
En las puertas de acceso del club y alrededor de las canchas, agentes del Servicio Secreto vigilan discretamente.
La relación entre la instructora y sus alumnas se profundizó a tal punto que cuando Valentina fue trasladada por su club a las canchas de la zona oeste de Chicago, lejos de Hyde Park, las hijas y esposa de Obama la siguieron.
Valentina, cuyo padre Alberto es instructor de tenis en Uruguay, dice haber nacido “con una raqueta en la mano”, al igual que sus tres hermanos.
Desde niña practicó el deporte y después de ganar campeonatos nacionales fue representante de Uruguay en torneos sudamericanos y giras por el mundo.
Además de estudiar ciencias de la comunicación y obtener una licenciatura, dijo que “el tenis es mi pasión y me encanta poder jugar todo el día”.
En Uruguay, Valentina fue instructora durante diez años de los clubes Biguá y Nautilus de Montevideo, antes de radicarse en Chicago.
Su esposo finalizó este año la maestría en economía en la Universidad de Chicago y la pareja planea regresar a su país en febrero de 2009.
Sin embargo, ante la pregunta de si le gustaría continuar como instructora de la familia Obama, pero en la Casa Blanca, entre risas responde: “primero que ofrezcan algo, después veré”.
La familia Obama ya visitó su futuro hogar en Washington, comenzó a buscar escuela para Malia y Sasha e hizo público el deseo de adoptar un perro.
Inclusive el barbero del presidente electo en Hyde Park ha sido informado que tal vez tendría que viajar una vez a la semana hasta la capital para atender a su ilustre cliente.
Pero sobre las clases de tenis, la instructora nada sabe sobre los planes de la futura familia presidencial.
“Mis planes son regresar a Montevideo en febrero, una vez finalicen los grupos de tenis a mi cargo. Pero me da pena separarme de mis alumnos, porque me he encariñado con todos, no solo con las hijas de Obama”, dijo Valentina. VN
Redes Sociales