<!--:es-->TESTIMONIOS DE LA DEVOCIÓN GUADALUPANA<!--:-->

TESTIMONIOS DE LA DEVOCIÓN GUADALUPANA

“Nuestra Madre de Guadalupe derrumba fronteras para dar a todos su amor”

Quién hubiese pensado que las plegarias a la Virgen de Guadalupe se escucharan en tantos países alrededor del mundo. La Madre de Dios, la que bien han nombrado la Patrona de México, Emperatriz de las Américas, ha conquistado también el corazón de muchas personas sin importar su credo, cultura o raza. Vida Nueva recogió las impresiones de quienes con lágrimas en los ojos agradecen a su madre de Guadalupe los favores recibidos.

ALICIA MARGARITA CRUZ es originaria de Michoacán, México, ella nos habló acerca de su devoción a la Virgen de Guadalupe:

“Yo siento que para todos los que acuden a ella, la Virgen de Guadalupe es una madre maravillosa. Providencialmente yo nací un día 12 de diciembre, mi mamá murió y mi papá quedó solo con dos niños, Raúl (de 5 años) y yo, Alicia (de 9 meses). Desde que yo recuerdo mi papá nos encomendaba a la Santísima Virgen de Guadalupe, cuando visitábamos algunos Santuarios debido a los viajes de trabajo de mi papá Mateo Cruz Montiel, recuerdo que él se arrodillaba y oraba ante la imagen y con lágrimas en los ojos le confiaba nuestro cuidado y protección.

“Yo aprendí de él a tenerle mucha confianza a la madre del cielo, he sentido su amparo en todo momento, mi hermano y yo nos educamos en Colegios católicos, a mí me tocó con las religiosas “Guadalupanas” en Guadalajara, Jalisco, mi escuela estaba ubicada casualmente en la calle Guadalupe Victoria.

“Me casé con un hombre muy bueno, también a él se lo encomendé a la Virgen, con los años una de mis hijas no podía tener bebés y se la encomendamos a la Virgen y a los 3 meses se embarazó y ahora ya tiene 2 niños.

‘Yo como madre de 8 hijos he tenido muchos afanes y apuros y siento un gran alivio y consuelo en nuestra madre del cielo. Yo he estado enferma de gravedad en varias ocasiones y cuando me llevan al hospital recurro a su bendita imagen y le digo: ‘No me dejes madre mía’. Y aquí estoy. Ya mi esposo murió, mi papá ya tiene 97 años de edad y mis hijos viven lejos, pero mi madre María de Guadalupe siempre me acompaña”, finalizó.

ISABEL TRIGG es originaria de Santa Cruz de la Palma, en las Islas Canarias, España, ella nos cuenta su testimonio: “Yo soy católica y en mi tierra se venera a la Virgen de la Nieves pero también mucho se le nombra la Virgen de Guadalupe. Yo estoy protegida por la Virgen, a mí ella me ha salvado de muchas dificultades, cuando yo me iba a casar con mi esposo quien en ese tiempo era soldado americano y se encontraba de misión en mi país, los últimos documentos consulares para mi matrimonio no llegaban y me fui a la iglesia y lloré y le pedí a la Guadalupana que me ayudara, cuando yo llegué de regreso a mi casa el paquete de papeles ya había llegado y todo estaba aprobado.

“Con los años yo le he encomendado a mi esposo quien hoy día sufre de cáncer de pulmón, lo iban a operar, pero él ya ha dejado su vida en las manos de Dios, sus dolores eran tan fuertes que me llegó a pedir en su desesperación que le diera un tiro, ya lleva dos años y medio sin medicinas, ha dejado de beber y él me ha dicho que ya debería haber muerto pero que algo le sostiene la vida y él me dice que son mis oraciones a la Virgen”.

Cabe mencionar que la casa de Isabel está llena de imágenes de la Virgen, ella le reza el Rosario todas las noches y siente su protección durante las penas y enfermedades. Isabel finalizó diciendo: “Yo invito a todos a que tengan fe, a que le entreguen su vida a Dios, que le pidan a la Virgen por todas sus preocupaciones”.

GEORGINA SEMAAN es originaria de Líbano y es profesora de escuela Elemental en la ciudad de Lakewood, ella tiene un gran cariño por la Virgen de Guadalupe quien ella asegura le transformó la vida, Georgina es de religión musulmana, sin embargo llena de emoción nos comentó. “Mi historia con la madre de Dios, la Virgen de Guadalupe plantó las semillas de esperanza en cada uno de los corazones de mi familia.

“Yo busqué su ayuda e intersección cuando mi hijo fue diagnosticado con autismo a la temprana edad de 2 años. Él comenzó mostrándose distraído y dejando de hablar, dejó de convivir con los demás sin estar alerta a lo que sucedía a su alrededor. Fue un tiempo muy angustiante para mí, entonces yo escuché acerca de Nuestra Señora de Guadalupe a través de la familia de uno de mis estudiantes.

“Ellos me platicaron que la gente visita la Basílica de la Virgen en México, que acuden en procesiones y caminan de rodillas para entrar a su templo y que ella responde a sus plegarias. Por ello yo viajé a la capital de México acompañada de mi hijo y de mi hermana Gloria en esa hermosa jornada de fe. Hicimos ayuno durante tres días, rezamos y fuimos experimentando la gracia de Dios en cada momento que pasamos en México.

“A la fecha el milagro continuamos viéndolo en mi hijo, él poco a poco comenzó de nuevo a hablar y se está mejorando día con día. Él ya ha recuperando su grado de conciencia sobre todas las cosas y tiene un gran amor por la vida”, finalizó.

FELIPE QUEZADA es originario del Departamento de Lempira en Honduras, él cuenta con 37 años y nos comentó emocionado acerca de la Virgen: “La devoción a la Guadalupana es muy grande en Centroamérica, yo desde pequeño aprendí de ella y ya de grande comencé a conocerla y ha sido una gran experiencia, ya que su aparición fue muy cercana a mi país y para mí la sencillez de la Virgen me impactó mucho y con ella nos invita a que seamos mejores cristianos.

“Una ocasión que yo viajé a mi país, cuando ya venía de regreso a Estados Unidos, me negaron la entrada por ciertos problemas con mis documentos, por lo que yo tenía que entrar ilegalmente, nadie me quería ayudar a pasar por la línea porque al ser centroamericano no me parecía a las fotos de las identificaciones que tenían.

“Esa noche me puse a rezarle el rosario a la Virgen de Guadalupe pues yo sé que ella ayuda a la gente sencilla, me encomendé a ella y al día siguiente fui a cruzar la línea, al llegar a esta yo me sentía seguro y protegido por Dios. Los agentes ni me hicieron preguntas al ver la fotografía y pude regresar a este país.

“Yo sé que yo vivo sostenido del amor de la Virgen de Guadalupe, ella es nuestra madre y nos lleva a los brazos de Cristo. Yo vengo de raíces muy indígenas y eso me da mucho orgullo porque Dios prefiere a la gente sencilla, como en México los indios se abrazaron con gran sinceridad a la Virgen, ella no escogió a los letrados, sino que escogió a quienes habían recibido a Jesús como su Salvador, pues ella es la verdadera madre del Dios por quien se vive, y es maravilloso pensar que a través de María todos podemos llegar al corazón de Jesucristo”.

El pastor de las Iglesia de San Bernardo en la ciudad de Bellflower, sacerdote diocesano Michael Ume nació en Nigeria, Africa, y él nos platicó lo siguiente: “Cuando yo aún no me ordenaba como sacerdote, tuve un proceso muy difícil de indecisión durante el cual le oraba constantemente a la Virgen María de Guadalupe que si era un deseo de Dios que yo fuera sacerdote, me lo hiciera saber.

“La Virgen me concedió discernir en mi vocación sacerdotal y todas las cosas se fueron logrando en una forma maravillosa.

“A mi en lo personal siempre me ha impresionado la sencillez de nuestra Madre, yo personalmente viajé primero a Portugal a conocer el pueblo de Fátima donde vivieron los videntes de las apariciones, la pobreza y sencillez de esa región me enseñó mucho acerca del corazón de María, después visité el Tepeyac y aprendí de la vida de San Juan Diego y su enorme amor por la reina del cielo. La oración de la Magnífica es un gran testimonio donde ella dice “Glorifica mi alma al Señor y mi espíritu se llena de gozo al contemplar la bondad de Dios mi Salvador, porque ha puesto la mirada en esta humilde sierva suya que desde ahora me llamaran dichosa todas las generaciones”.

Cada año el Padre Michael organiza un Rosario Viviente dedicado a la Virgen de Guadalupe y las Mañanitas a la Virgen el día 12 de diciembre. Esto aunado a otras actividades que ha promovido para que la comunidad conozca y se enamore más de la Madre del Cielo.

THERESA THIBODEAUX es una joven de 27 años, nació en la ciudad de Long Beach, California y ella cuenta con una maestría en Educación Religiosa, ella nos platicó acerca de su experiencia conociendo a la Virgen de Guadalupe.

“Yo me encontraba cursando mi postgrado cuando entre mis clases me recomendaron la lectura del libro “Guadalupe, Madre de la Nueva Creación”. Esta lectura fue mi primer encuentro profundo con las revelaciones que la Virgen le hizo a Juan Diego en México.

“Fue tanto lo que impresionaron las apariciones de la Virgen que comencé poco a poco a usar su imagen en mi vida, en mi casa y noté que cada vez que necesitaba acordarme de estar en contacto con Dios, de ser una mejor persona y de no olvidar mis metas, me encontraba una imagen de ella en alguna parte, un restaurante, un anuncio etc.

“Una ocasión cuando estaba preparándome para una clase durante la medianoche, le pedí su inspiración y fortaleza para hacer mi trabajo, ella me lo concedió. Hoy sé que ya no estoy sola, que ella en su humildad tiene toda la fuerza que necesitamos para salir adelante”.

Actualmente Theresa es Coordinadora de Preparación para Adultos Jóvenes y Clases de Confirmación para jóvenes en la Arquidiócesis de Los Angeles. VN

Share