¿QUÉ PUEDEN ESPERAR LOS INMIGRANTES LATINOS DE LA “REFORMA” MIGRATORIA ?

Un repaso de la historia de las leyes de inmigración de los Estados Unidos es muy reveladora. Claramente indica que muchas de ellas fueron basadas en principios que hoy serían considerados indebidos y, a veces, racistas y frecuentemente para su mismo provecho.

1790… El Decreto de Naturalización solamente permitía a la gente “blanca” libre, ser ciudadanos de los Estados Unidos.

1882… El Decreto de Exclusión China era una ley racista y restrictiva que excluía a la población china de inmigrar a los Estados Unidos.

1907… El “ Pacto de Caballeros ” impidió que la población japonesa inmigrara a los Estados Unidos.

California prohibía que las personas chinas tuvieran propiedades.

Después de la Primera Guerra Mundial, el Decreto de Cuota limitaba a los inmigrantes a solamente el 3% de la nacionalidad que ya estuviesen aquí. Más tarde, fue reducido al 2%.

1929 a 1940… Bajo “Operacion Mojado”, más de 3 millones de latinos, la mayoría exicanos, fueron deportados de los Estados Unidos, incluyendo a miles de ciudadanos méxico-americanos sin darles ninguna oportunidad de probar su derecho de estar en el país.

1952… El Decreto McCarran Walters (INA) estableció cuotas limitando el número de visas permitidas para cada país.

1996… Las leyes de inmigración crearon motivos adicionales para negar visas a aplicantes, y para la deportacion de inmigrantes admitidos legalmente. Eliminó el derecho para que los recién llegados tuvieran un juez que revisara la decisión de negar su entrada y creó una provision que permitió que los inmigrantes fueran deportados “de por vida” si eran convictos de felonía agravada. También, aun los inmigrantes admitidos legalmente no tenían permitido obtener beneficios del gobierno, como asistencia del Welfare durante cinco años.

Con esta historia en mente, uno puede entender mejor cómo se decidirá finalmente la Reforma Migratoria. Podemos estar seguros que las necesidades y los deseos de los inmigrantes no serán un factor importante. De hecho, las leyes anteriores de inmigración demuestran que la justicia y la compasión tampoco han sido un requisito. Como en el pasado, los intereses personales y preferencias de las fuerzas predominantes en el gobierno, Republicanos y Demócratas, decidirán a quién le será permitido quedarse legalmente, quién puede entrar legalmente, y bajo qué condiciones.

Desafortunadamente, los dos partidos están más interesados en cómo les afectarán las nuevas leyes, en vez de preocuparse que si es justo para los inmigrantes que trabajan largas horas por salarios bajos para hacer el trabajo que nadie más está dispuesto a hacer.

Si la Reforma Migratoria estuviera motivada por propósitos humanitarios, los Republicanos no estarían insistiendo en eliminar la unificación familiar como una prioridad esencial, y los Demócratas nunca la aceptarían. Y los Republicanos no estuvieran insistiendo en imponer una penalidad de $5,000 y de $3,000 a $4,000 en costos de trámite por cada inmigrante. Y no estuvieran insistiendo en la innecesaria y costosa salida y regreso a este país. Ninguna de estas insostenibles condiciones son necesarias; son impuestas para que los políticos puedan satisfacer a sus partidarios, por quienes harán cualquier cosas a fin de obtener sus votos. En resumen, re-elegirse es mucho más importante que aprobar leyes humanitarias o hacer lo que es correcto.

La Reforma Inmigratoria propuesta, injustamente crea un conflicto entre los inmigrantes que están aquí desde el 1 de Enero de 2007 o antes, y aquéllos que todavía están tratando de entrar en el país. Permitiría a quienes ya estan aquí, ganar un derecho muy limitado a quedarse y trabajar, aunque con muchas condiciones costosas.

Y ellos tendrían que esperar de 8 a 13 años para tener una residencia permanente legal o la cuidadanía. Durante ese tiempo, los empleadores de Estados Unidos obtendrían lo que quieren: empleados a quienes se les puede pagar salarios extremadamente bajos por trabajo exepcionalmente duro y muchas veces peligroso. Y los inmigrantes ya no tendrían permitido inmigrar a sus padres, hijos adultos o hermanos. ¿Aceptarían algunos de estos políticos tales condiciones para sus propias familias?

El Programa del Trabajador Huésped también es un plan injusto para permitir a los empleadores de Estados Unidos tener trabajo barato y al mismo tiempo asegurar que a esos trabajadores nunca les será permitido convertirse en residentes permanentes legales o inmigrar a sus familias.

Estos trabajadores serían vulnerables a la explotación de empleadores y otros, muy parecidos a los “Braceros” del pasado. Sus derechos de tratamiento médico, compensasión y empleo son totalmente controlados por sus empleadores y con frequencia no acumulan absolutamente ningún derecho.

Existe una razón muy importante del por qué las provisiones más restrictivas y anti-immigrantes de la ley propuesta fueron introducidas, patrocinadas e insistidas por los Republicanos.

Ellos saben que en el 2006, el 69% de los votantes latinos votaron por los Demócratas, de acuerdo con un estudio del Pew Hispanic Center.

Los Republicanos saben que siempre ha sido este el caso y probablemente siempre lo será. Así que ellos consideran a cada nuevo inmigrante latino un probable voto futuro para un Demócrata. Esto explica porqué las leyes que ellos han patrocinado y aprobado han ampliado los motivos para negar la entrada y parar la deportación. A nivel estatal, leyes como la infame Proposición 187 de California, la eliminación de la educación bilingüe, no licencias de manejo y otras fueron introducidas para dificultar extremadamente la estadía de inmigrantes indocumentados. Al final es siempre sobre re-elegirse. En tanto los latinos sean vistos como votantes Demócratas, los Republicanos seguirán patrocinando leyes para limitar su entrada, expandiendo la deportación, y hacer más difícil el llegar a ser un ciudadano de Estados Unidos.

La pregunta real es si los Demócratas tendrán la visión y la sabiduría para saber que es hora de oponerse a estas condiciones crueles e injustas hasta el fín, sin compromisos. Los latinos siempre han apoyado al Partido Demócrata y merecen protección de las injustas provisiones anti-immigrantes de la Reforma Migratoria propuesta. VN

Reseña sobre el escritor

El Lic. Araujo es experto comentarista sobre asuntos legales. Es autor del único libro bilingüe sobre las leyes de los EE.UU., La Ley y Sus Derechos Legales / The Law and Your Legal Rights; asimismo es catedrático universitario sobre materias legales. En la actualidad, funge como Asesor Jurídico del Consulado de México y El Salvador en el Condado de Orange.

Web Site: http://www.jessaraujo.com

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