LOS LATINOS SE VOLCARON PARA DAR LA BIENVENIDA AL PAPA
Decenas de miles de creyentes hispanos se concentraron hoy en torno a la Casa Blanca para ver de cerca al papa Benedicto XVI, que hoy inició su jornada de actividades en Estados Unidos con una reunión con el presidente George W. Bush.
El Santo Padre participó hoy en una ceremonia de bienvenida en la Casa Blanca y se reunió en el Despacho Oval con Bush, para hablar de asuntos como la inmigración y la necesidad de dar un trato considerado a los inmigrantes y sus familias.
Antes de salir de Roma, el Sumo Pontífice ya había adelantado que sacaría a relucir el asunto de la inmigración, un tema en el que se vio muy implicada la jerarquía católica estadounidense.
Numerosos prelados se manifestaron el año pasado públicamente en favor de una reforma migratoria exhaustiva que permitiera regularizar la situación de cerca de al menos doce millones de inmigrantes ilegales que se calcula que existen en EEUU.
Esa reforma migratoria fracasó finalmente en el Congreso. Desde entonces, varios condados y autoridades locales han aprobado rigurosas medidas contra los inmigrantes ilegales.
Mientras el Papa permanecía en la Casa Blanca, decenas de miles de personas, entre ellas muchos hispanos, guardaban sitio a lo largo de la avenida Pensilvania para tener un atisbo del hombre que los católicos consideran un vicario de Dios en la Tierra.
La abundante presencia hispana, visible en carteles, vítores en español al Papa y en las numerosas conversaciones en este idioma a lo largo del recorrido, permitía constatar las cifras que indican que, de setenta millones de católicos en EEUU, el 60 por ciento es de origen latino.
Por encima de sirenas y radios de la Policía, que mantenía una fuerte presencia de seguridad en el trayecto papal, dominaban los sonidos andinos de panderetas, tambores y guitarras.
Muchos de ellos confesaban que habían llegado al rayar el alba para lograr un sitio favorable.
“Llevamos aquí desde las 7 de la mañana para coger un buen sitio” explicó a Efe Simeona León, de Perú. Ella y otros 113 feligreses de tres iglesias del estado de Nueva Jersey tienen previsto seguir al Santo Padre hasta Nueva York.
“Le seguimos porque es el mensaje de Cristo” seguir y obedecer al Papa, dijo Ana Estrada de Puerto Rico, que ha venido con su familia a Washington en representación de su parroquia. “Espero que nos traiga iluminación, un mensaje de gracia que nos haga sentir más cerca de Dios”, agregó esta católica.
Por su parte, Justino Díaz, sacerdote de la iglesia del Inmaculado Corazón de María en Newark, también en Nueva Jersey, expresó su esperanza de que la visita del Pontífice pueda producir cambios en la legislación migratoria.
“El Papa es una voz fuerte y apelará a la conciencia de los congresistas, espero que a ellos les llegue su mensaje’ dijo el sacerdote, mientras sus feligreses recordaban que “¡para Dios no hay inmigrantes!”.
La ceremonia de bienvenida al Papa esta mañana en la Casa Blanca también tuvo acento hispano con gritos “¡Que viva el Papa!” de algunos fieles latinos invitados al acto.
En su discurso, el Papa se presentó como “amigo y anunciador del Evangelio” y explicó que “los católicos de América han ofrecido y siguen ofreciendo una excelente contribución a la vida de su país”.
Asimismo, deseó que su visita a Estados Unidos, que comenzó ayer y que durará hasta el domingo, “pueda ser fuente de renovación y esperanza para Estados Unidos”.
Romanita, una joven de 30 años venida desde California para estar presente en la ceremonia, destacó los elogios a la “generosidad” y a la “pluralidad” que el Papa dedicó a los Estados Unidos y que, añadió, “nos hacen sentir que, al fin y al cabo, somos una buena nación”.
Entre los latinos presentes también se pudieron ver a algunos soldados en la zona reservada en los jardines de la Casa Blanca para los ex combatientes de las guerras de Irak y Afganistán. VN
Redes Sociales