GUARDIA NACIONAL TENDRÁ 6 MIL SOLDADOS EN LA FRONTERA

Estados Unidos tendrá 6 mil soldados en la frontera sur al 1 de agosto en apoyo de la Patrulla Fronteriza, pero “esto no es una operación militar ni una demostración de fuerzas”, afirmó hoy el jefe de la Oficina de la Guardia Nacional, teniente general H. Steven Blum.

La operación “Jump Start”, que comenzó el pasado 1 de junio, empleará a unos 50 mil soldados de las milicias estatales en turnos de tres semanas a lo largo de los próximos dos años en una región por la cual cada año cruzan millones de inmigrantes indocumentados.

La Guardia Nacional -que componen milicias de voluntarios a las órdenes de los gobiernos de cada estado- tiene actualmente unos 69.000 soldados en ultramar, particularmente en Irak.

Blum explicó que otros 8 mil soldados de la Guardia Nacional participan en diversas zonas del país en el control de incendios forestales.

“Al mismo tiempo estamos preparados para la temporada de huracanes que, según nos dicen los meteorólogos, este año podría traer fuertes no sólo en el sur el Golfo, sino también en la costa Atlántica y al norte hasta en Nueva Inglaterra”, añadió Blum en una conferencia de prensa en el Pentágono.

“Hemos redoblado nuestros esfuerzos desde Maine a Texas y las tropas están mucho mejor instruidas y equipadas para encarar la temporada de huracanes”, según el oficial.

“Y aún así, lo prometo, para el 1 de agosto habrá 6 mil soldados de Guardia Nacional en los cuatro estados de la frontera sudoeste: California, Arizona, Nuevo México y Texas”.

En mayo, en medio de un acalorado debate nacional sobre la reforma de la ley de inmigración, el presidente George W. Bush anunció el envío de soldados de la Guardia Nacional para apoyar a la Patrulla de Fronteras, que es una agencia policial y no depende del Pentágono, mientras ésta incrementa el número de sus agentes.

“Nuestros socios y vecinos, los mexicanos, están habituados a ver a la Guardia Nacional en la región, y aceptan su presencia”, agregó Blum. “La Guardia Nacional no amenaza la seguridad, la vida o la libertad de los mexicanos, ni provoca a nuestros amigos y aliados de México de una manera contraproducente”.

Blum insistió a lo largo de su conferencia de prensa en el carácter civil de la operación “Jump Start” que, según dijo, ni siquiera recibió ese nombre por parte del Pentágono, sino del Departamento de Seguridad Nacional bajo cuya autoridad operan las agencias de aduanas, fronteras e inmigración.

“Nuestra misión no es cerrar la frontera, sino darle apoyo a la Patrulla Fronteriza”, agregó. “Nosotros, de hecho, apoyamos una operación civil y policial, y esperamos que la Guardia Nacional salga de allí en dos años o menos, a medida que la Patrulla Fronteriza aumenta su contingente”.

Blum explicó que la mayor parte de los soldados de Guardia Nacional emplazados hasta ahora en la frontera proceden de los cuatro estados que limitan con México, pero los gobernadores de otros 30 estados ya han firmado los acuerdos para el envío de sus milicias para períodos de instrucción en la región.

Todos los soldados de Guardia Nacional que operen en apoyo de la Patrulla Fronteriza estarán bajo las mismas normas para el uso de la fuerza. Aproximadamente el 40 por ciento de ellos portará armas pequeñas y munición, y todos tienen instrucción de defenderse si son atacados.

“La Guardia Nacional está allí en apoyo de las agencias policiales que tienen la autoridad y la responsabilidad legal de custodiar las fronteras”, dijo Blum. “La Guardia Nacional no tiene esa autoridad ni responsabilidad en absoluto”.

“No vamos a reemplazar a la Patrulla Fronteriza, no haremos labor policial”, afirmó. VN