CRISIS EN LA FRONTERA CON NIÑOS INMIGRANTES

La creciente oleada de niños y adolescentes que llega ilegalmente y sin acompañamiento a Estados Unidos- en su gran mayoría hondureños, guatemaltecos y salvadoreños- están “huyendo, no migrando” de pobreza, violencia, extorsión, secuestro y muerte en sus comunidades y escuelas, dicen observadores.

Autoridades señalan que este flujo migratorio ha aumentado en un 90 por ciento desde el año pasado, y predicen que podría llegar a 90 mil a finales de este septiembre, y tal vez a 130 mil en 2015.

Según el Departamento de Seguridad Nacional, la ley le prohíbe deportar de inmediato a menores de edad una vez que llegan a Estados Unidos, en caso de que su patria no comparta una frontera con el país norteamericano. Pero la deportación automática sí podría aplicarse a los menores procedentes de México.

Y mientras sigue el aumento de niños inmigrantes, especialmente en la frontera con Arizona, autoridades políticas estadounidenses, organizaciones humanitarias y los gobiernos de América Central y México discuten las posibles salidas de una de las peores crisis humanitarias que ha vivido Estados Unidos en las últimas décadas.

Recientemente el presidente Barack Obama abordó posibles soluciones con su homólogo mexicano, Enrique Peña Nieto, hablando de la responsabilidad “compartida” de sus naciones para garantizar la seguridad en ambos países y en toda la región. Aún no se vislumbra un acuerdo.

Mientras tanto, muchos republicanos en el Gobierno culpan a Obama de la llegada de menores sin compañía, y aprovechan para pedir acciones inmediatas, como mandar tropas a la frontera y deportar a los llamados “DREAMers” (Soñadores), porque según ellos alientan a otros a hacer lo mismo, provocando este tipo de migración.

Al respecto, el Huffington Post informó que el representante Darrell Issa (R-CA) está recaudando firmas entre sus colegas republicanos de la Cámara Baja para que el presidente Obama ponga fin al programa DACA (Programa de acción diferida para estudiantes indocumentados) que ampara a los “DREAMers”.

Organizaciones humanitarias no lucrativas como America’s Voice no dejan de enjuiciar esa postura. “Los niños están huyendo de la violencia relacionada con carteles de las drogas y pandillas en Honduras, Guatemala y El Salvador, buscando seguridad en la región y en Estados Unidos. El gobierno de Obama está tratando de elaborar un enfoque que combine estrategias de corto y largo plazos, así como protecciones para los menores y controles en el sistema migratorio. Nosotros no estamos de acuerdo con todo lo que hace, pero está tratando de hacer frente a la crisis de manera responsable”, dijo Frank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice, quien se pregunta si los líderes “mantendrán nuestros valores como nación compasiva que ofrece protección a aquellos en peligro, y pondrán los intereses de los niños primero…”.

‘PROTEGERLOS ES NUESTRA OBLIGACIÓN MORAL’

En medio de toda esta maraña política muchos menores de edad siguen arriesgando sus vidas en busca de un sueño que cada vez más se parece a una pesadilla.

“Las razones de esta crisis son complejas. Muchos de estos niños están llegando porque desesperadamente huyen de la violencia. Protegerlos es nuestra obligación moral”, afirmó la hermana Simone Campbell, directora ejecutiva de NETWORK, una organización Católica Nacional para la Justicia Social.

“En lugar de simplemente regresarlos a un mayor peligro, el Congreso debería examinar por qué están huyendo e idear maneras efectivas y compasivas de enfrentar esta crisis aquí y en sus respectivos países”, añadió la religiosa.

Por su parte, Angélica Salas, directora ejecutiva de la organización a favor de los inmigrantes, CHIRLA, dijo que esta crisis humanitaria es un ejemplo de cómo las leyes estadounidenses se han vuelto crueles e inhumanas en el terreno migratorio.

“Mientras que miles de niños y familias de Centroamérica se ven obligados a huir de las garras de las maras, del crimen organizado, la delincuencia común, los coyotes, y las economías inestables, varios grupos anti-inmigrantes están pidiendo más vigilancia en la frontera, deportaciones de niños y familias, y el fin de un programa que ha beneficiado a más de 500 mil jóvenes inmigrantes [DACA”, afirmó.

En tanto que el Arzobispo José H. Gomez de la Arquidiócesis de Los Ángeles también se manifestó ante esta lamentable situación.

“Nuestra Iglesia siempre ha sido de inmigrantes, así como nuestra nación…Como todos sabemos, el sistema migratorio en nuestro país está roto, y el resultado es que muchas familias y niños están sufriendo, así como nuestros vecinos, compañeros de trabajo y los que asisten a nuestras parroquias. Sé que muchos de ustedes están involucrados en ayudar a aquellos hermanos y hermanas atrapados en este sistema fracturado”, dijo el Arzobispo, y anunció que el próximo domingo 20 de julio de 2014 a las 3:30 p.m. se celebrará la Misa anual en reconocimiento de los inmigrantes en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles. Su principal objetivo es rezar de manera especial por una reforma migratoria y la reunificación de las familias divididas.

‘… MUCHOS SE CONVIERTEN EN VÍCTIMAS DE DELITOS VIOLENTOS O ABUSO SEXUAL’

Ante esta situación, el presidente Obama mandó al vicepresidente Joe Biden a Centroamérica para encontrar propuestas concretas que vayan a la raíz de la inmigración ilegal que llega de Centroamérica.

Biden se reunió con los presidentes de Guatemala, Otto Pérez Molina, de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y el coordinador general del Gobierno de Honduras, Jorge Ramón Hernández Alcerro. Y en entrevista exclusiva con el diario El País, el vicepresidente estadounidense expresó que “estos niños son los más vulnerables y muchos se convierten en víctimas de delitos violentos o abuso sexual. La gran mayoría depende de peligrosas redes de contrabando de seres humanos para que los transporten a través de América Central y México, poniendo en peligro sus vidas”, enfatizó el vicepresidente. Asimismo dijo que hay percepciones erróneas en Centroamérica de que estos niños se reunirán de manera segura con sus padres una vez que los detengan en la frontera estadounidense, sin la posibilidad de deportación. La realidad es que de acuerdo con la ley, si hoy día un menor cruza ilegalmente la frontera, no podrá ampararse a “DACA”, ni tampoco podrá beneficiarse de una reforma migratoria [actualmente bloqueada en el Congreso].

“Todos los niños y las familias están sujetos a los procesos de deportación. Lo importante es que no vale la pena someterlos a un viaje peligroso cuando no hay luz al final del túnel”, dijo el mandatario.

‘…PARA EL GOBIERNO DE EL SALVADOR CONSTITUYE UNA PRIORIDAD FACILITAR LA REUNIFICACIÓN FAMILIAR’

A través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, el Gobierno de El Salvador está reforzando el servicio en los consulados más cercanos a las zonas fronterizas de Estados Unidos. El pasado junio la viceministra para Salvadoreños en el Exterior, Liduvina Magarín, viajó hacia Túcson, Arizona, donde sostuvo reuniones con autoridades fronterizas en Nogales. Personal de la embajada de El Salvador en Estados Unidos también se movilizará a la zona para reforzar los consulados fronterizos. Y Relaciones Exteriores de El Salvador también quiere estar presente en la ciudad de McAllen, Texas, donde se enviará otro contingente como refuerzo.

“La aspiración de Cancillería radica en tres puntos: uno es garantizar las condiciones básicas a las que tienen derecho como niños y niñas; dos es contactarlos con sus familiares, y tres, intentar reunificarlos con sus familias”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Hugo Martínez.

Magarín reiteró que “para el Gobierno de El Salvador constituye una prioridad facilitar la reunificación familiar como una garantía del bienestar de estos niños y niñas, con apego a los procedimientos que Estados Unidos determine según su legislación”.

Por su parte, el embajador de El Salvador en Estados Unidos, Rubén Zamora, añadió que están tomando medidas serias para concientizar a la población sobre los peligros que representa la migración irregular hacia Estados Unidos.

‘EN ESTE MOMENTO LA NECESIDAD MÁS URGENTE ES CONSEGUIRLES AYUDA LEGAL…’

Recientemente el senador Robert Menéndez (D.-NJ) presentó un plan para abordar el tema y pidió un mayor apoyo financiero a las numerosas organizaciones humanitarias y legales, involucradas en los esfuerzos para ayudar a estos niños.

“Lo que estamos viendo aquí es una urgente cuestión humanitaria internacional”, dijo Janet Murguía, presidenta de NCLR (Consejo Nacional de La Raza). “Estos son los niños que buscan un refugio seguro, ya sea en su propio país, en los países vecinos o en la frontera de EE.UU. Son refugiados y deben tratarse como tal. La forma en que abordemos esta cuestión reflejará la manera en la cual estamos defendiendo nuestros valores como nación”. Y continuó: “Mientras que la razón principal de esta crisis es clara, la solución es mucho más compleja e implica no sólo hacer cumplir las leyes de EE.UU., sino también su política exterior y la de los organismos internacionales. Creemos que el plan del senador Bob Menéndez es un importante paso. Exige, entre otras cosas, centrarse de inmediato en el bienestar de los niños, tomar medidas enérgicas contra los traficantes y un énfasis en promover el desarrollo social y económico de la región”.

Varias organizaciones afiliadas a NCLR han sido llamadas a la acción para proporcionar servicios básicos y apoyo a estos niños, como “Southwest Key” en Austin, Texas, el mayor proveedor de servicios de bienestar infantil en la nación.

“Vamos a abrir cinco nuevos centros de acogida para atender a estos niños refugiados, que son pequeños desesperados por un lugar seguro para vivir y crecer”, señaló Juan Sánchez, presidente y consejero de Southwest Key.

“En este momento la necesidad más urgente es conseguirles ayuda legal. Hay una serie de organizaciones que siempre han estado involucradas en estos temas como Kids in Need of Defense (KIND) y el Centro Nacional de Leyes de Inmigración (NILC), así como ProBar, un proyecto de representación del inmigrante y refugiado de la Asociación Americana de Abogados. Les pedimos a abogados, empresas y personas en general que consideren donar ayuda financiera y en especies a las organizaciones benéficas que participan activamente, como por ejemplo Church World Service y Caridades Católicas”, concluyó Murguía.

¿QUÉ HARÁ ESTADOS UNIDOS?

“Nosotros vemos esto como una responsabilidad compartida entre todos los Gobiernos afectados”, respondió Biden a la pregunta de El País. “Ningún gobierno quiere ver a sus ciudadanos poner sus vidas en peligro y es nuestro trabajo hacer lo necesario para evitar que la gente siga haciéndolo”.

Biden informó que el presidente ordenó a la Agencia de Administración Federal de Emergencias que coordine una respuesta de todo el gobierno a esta situación urgente. “Nuestra prioridad es manejar la situación humanitaria, asegurando que a estos niños se los aloje, alimente y reciban cualquier tratamiento médico necesario”. Y agregó que en segundo lugar, el Gobierno estadounidense está trabajando en coordinación con México y Centroamérica “para educar a potenciales inmigrantes sobre los peligros de intentar un viaje tan peligroso, y se les informa de que no se beneficiarán de DACA ni de una posible reforma migratoria”.

En tercer lugar, el vicepresidente de Estados Unidos comentó que “van a aumentar los recursos cerca de la frontera para detener el flujo migratorio, y manejar el proceso de deportación tan rápida y eficientemente como sea posible”.

En relación a esto, el subsecretario de Seguridad Nacional (DHS) Alejandro Mayorkas dijo recientemente a los medios que “esto permitirá a ICE regresar a los inmigrantes sin papeles de Centroamérica con orden de deportación en forma más rápida”. El funcionario indicó también que jueces y agentes escucharían el reclamo de cada migrante, pero que “muchos centroamericanos no son elegibles para asilo político”.

Esto causó alarma entre grupos que defienden a los inmigrantes porque la aceleración de estos procesos provocaría la deportación de muchos con solicitudes legítimas de asilo o estatus de refugiados. La Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas estima que más de la mitad de estos inmigrantes podrían reunir los requisitos para obtener protección como refugiados. VN

PASOS DEL PROCESAMIENTO DE MENORES INMIGRANTES

•Revisión médica e inicio del trámite migratorio.

•Traslado a centros de detención donde reciben vacunas y demás chequeos médicos.

•Traslado a albergues temporales.

•Identificación de personas que se hagan cargo de ellos, y entrega a familiares mientras culminan los trámites migratorios.

POR QUÉ EMIGRAN NIÑOS SIN ACOMPAÑANTES

• EN GUATEMALA LA CAUSA MÁS COMÚN ES LA POBREZA Y DISCRIMINACIÓN de los indígenas, aunque muchos jóvenes de áreas urbanas sufren violencia y amenazas de las pandillas (maras).

• EN HONDURAS Y EL SALVADOR ES MÁS COMÚN LA VICTIMIZACIÓN por las pandillas, extorsión y amenazas.

• EN EL SALVADOR AUMENTARON LAS DESAPARICIONES, SECUESTROS, EXTORSIÓN y asaltos; existe un gran conflicto entre las maras, afectando al país.

• EN HONDURAS TAMBIÉN HAY MARAS, TRAFICANTES Y CARTELES. La tregua entre pandillas no ha funcionado.

*Fuente: Elizabeth Kennedy, catedrática, investigadora, y profesora de la Universidad Estatal de San Diego y de la Universidad de California en Santa Bárbara.

NO CALIFICAN PARA TPS

El Gobierno de Estados Unidos no otorga un “Estatus Temporal de Protección” (TPS) a estos menores que cruzan solos la frontera, como lo tiene El Salvador, Honduras y Nicaragua en base a los desastres pasados, y que permitió que decenas de miles de personas de esos países que ya estaban en Estados Unidos durante muchos años, permanecieran aquí legalmente.

Portavoces de la Administración Obama comunicaron que los menores hondureños y salvadoreños que hayan llegado o lleguen solos a Estados Unidos por la frontera sur, no pueden obtener el TPS, aunque sus padres tengan este beneficio.

“No califican porque para hacerlo, tendrían que haber estado en el país desde el día en que se anunció el TPS”, dijo Esther Olavarría, asesora del Secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson.

Por su parte los guatemaltecos no cuentan con este programa, y el presidente de ese país, Otto Pérez Molina, pidió a Joe Biden que se considere una medida similar para sus connacionales. VN