CATÓLICOS ALIMENTAN SU FE, AUN CUANDO ESTÁN ‘MÁS SEGUROS EN CASA’

(fOTO: Rodolfo y María de Jesús Siller, con la Virgen de Guadalupe en ‘La Puntilla’ en Mazatlán, Sinaloa).

Por PAULINA HERRERA

No son tiempos normales. En una emergencia mundial, los católicos alrededor del mundo han puesto a prueba su fe y millones de ellos han encontrado valiosas formas de mantenerse unidos a pesar de la pandemia del coronavirus.

En Los Ángeles, católicos como María de Jesús y su esposo Rodolfo, originarios de Sinaloa, México, han recurrido a redoblar sus costumbres católicas en casa, mientras que Norma Arreola y su hijo Leonel, han recurrido a las redes sociales y al teléfono celular para mantenerse conectados con sus familiares y amigos al tiempo que continúan su cotidiana tarea de evangelizar.

“Nosotros rezamos y oramos todos los días y esto hace que estemos juntos”, explica María de Jesús, “pero ahora en casa, además rezo el Rosario en la mañana, prendo veladoras pequeñas ante las imágenes de San Judas Tadeo, la Virgen de Guadalupe y de Nuestro Señor Jesucristo”, añade la contadora pública.

‘ORAR NOS TRANQUILIZA Y NOS DA OPTIMISMO…’

Desde que la Iglesia acató las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud en torno a la pandemia del COVID-19, María de Jesús y Rodolfo han estado muy atentos a los acontecimientos de la emergencia mundial. “Orar nos tranquiliza y nos da optimismo para comenzar el día lleno de esperanza y buenas intenciones”, agrega Rodolfo, instructor del Centro de Capacitación del Sistema de Transporte Público de Los Ángeles (MTA).

‘EL SEMBRADOR TRASMITE LA MISA EN VIVO DESDE LA BASÍLICA …’

Norma Arreola y su hijo Leonel son inmigrantes procedentes de la Ciudad de México. Como locutora de El Sembrador, Norma tiene muy clara su misión de católica ejemplar en este periodo tan difícil.

Por fortuna, Arreola y su hijo están muy bien conectados con la tecnología a favor de la fe y gracias a ello han adoptado un sistema de comunicación con familiares y amigos muy efectiva:

“Todos los días a las siete de la tarde me conecto con mi amiga Norma Gallegos que vive en el estado de Colorado. Ella a su vez, se conecta con su suegra en Guatemala y hacemos oración. También hacemos novenas. En estos momentos estamos por terminar la Novena de la Divina Misericordia”, explica la comunicadora.

“También en nuestro grupo de oración tenemos un chat en donde nos conectamos para orar casi todos los días”, agrega.

Además de mantener su fe intacta, Norma afirma que en los tiempos de la emergencia de “Más Seguro en Casa”, ha sido una buena oportunidad para ordenar su propio hogar, hacer limpieza general y “nosotros estamos haciendo manualidades…el ocio no es un buen consejero, así que limpiar y re decorar son buenas opciones para sentirnos activos y entusiasmados”, explica.

Para Leonel, estudiante de 20 años y que aspira a ser seminarista, quedarse en casa no ha sido un gran sacrificio. Al contrario. Como buen estudiante de tecnologías en las comunicaciones, se ha dedicado a hacer ejercicios en su computadora y prepararse para el examen final, pues aun cuando sigue teniendo clases en línea, habrá que cumplir con los requerimientos curriculares de su carrera.

Ahora que las Iglesias están cerradas temporalmente como medida de precaución para evitar la propagación del contagio del feroz virus, Leonel recomienda varias formas de “asistir” a misa.

Muchas parroquias tienen un portal en alguna red social como Facebook o YouTube, y transmiten la misa en vivo, y aun cuando esté el sacerdote y algunos voluntarios apoyándolo, muchos de ellos son monjas.

“El Sembrador trasmite la Misa en vivo desde la Basílica de la capital mexicana, la Misa del Papa Francisco desde Santa Marta en Roma, y el domingo también transmitió la Misa de Santo Tomas de aquí de Los Ángeles”, explica Leonel.

También comentó que la Iglesia ha recomendado hacer horas santas con oraciones al Santísimo y para ello, muchas parroquias han colocado cámaras de video enfocadas a las imágenes de tal forma que es como si la persona estuviera en el lugar aun a la distancia, pero a través de las redes sociales.

“Por ejemplo, en la Basílica de Guadalupe hay una cámara enfocando directamente a la imagen de la Virgen las 24 horas del día. Las personas pueden conectarse y hacer su petición. Lo importante es la devoción y creer profundamente en nuestra conexión con Dios”, explica la mamá, Norma Arreola.

Finalmente, Leonel explicó que en estos momentos de pandemia se pueden aprovechar avances tecnológicos de conexión en grupo como Zoom, un sistema que está teniendo mucho auge porque puede mantener la comunicación simultánea con hasta 50 personas, mientras que hasta 10 mil participantes lo pueden escuchar, dependiendo del plan que elija cada usuario. VN