ARQUIDIÓCESIS DE LOS ÁNGELES APOYA LA INICIATIVA DE LEY 34

Garantizar que personas inocentes no sean ejecutadas al reemplazar la pena de muerte de California con una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional es el punto clave que contiene la Proposición 34 y que apoyan los Obispos católicos de California y varias personalidades, entre ellas el actor y activista Edward James Olmos y el político Gil Cedillo.

Javier Stauring, de La Oficina de Justicia Restaurativa de la Arquidiócesis de Los Ángeles, explicó que la pena de muerte en California además que va en contra de las enseñanzas básica de la fe católica, es una medida que no contribuye a persuadir a delincuentes, por consiguiente, no disminuye los índices de hechos delictivos. Todo lo contrario, con la aplicación de la pena de muerte se gasta millones de dólares en procesos que duran hasta 25 años para evitar o llevar a cabo una ejecución, en lugar de invertirse en programas que ayuden a tener comunidades más seguras en el estado.

De acuerdo a un comunicado entregado en una conferencia de prensa frente al Ayuntamiento de Los Ángeles, la Proposición 34 cuenta con el apoyo del principal defensor de la iniciativa de la pena de muerte en 1978, Ron Briggs, también con Don Heller, abogado que redactó la ley de la pena de muerte de California y con Jeanne Woodford, ex Alcalde de San Quintín que supervisó cuatro ejecuciones llevadas a cabo en el estado.

“Muchos se sorprenden al enterarse de que la pena de muerte es mucho más costosa que la condena de cadena perpetua sin libertad condicional. En el pabellón de la muerte, los prisioneros viven en celdas individuales especiales, tienen abogados especiales, el privilegio de ejercitarse, recibir visitas y presentar apelaciones financiadas por los contribuyentes que pueden tomar décadas”, asevera Stauring.

Sí en la 34 pone fin al despilfarro y hace que las personas convictas de homicidio trabajen y paguen una indemnización a los familiares de la víctima a través del “Fondo de compensación de la víctima”, agrega.

“Con la pena de muerte corremos el riesgo de asesinar una persona inocente; lo hemos hecho en el pasado. Desde el año 1973 ha habido más de 140 personas en el país que ya estaban sentenciadas a morir y se comprobó que eran inocentes; algunas de ellas están con nosotros”, dijo Stauring a VIDA NUEVA.

Se refería a Juan Roberto Meléndez, un ex convicto, quien testificó que en 2002 fue liberado del pabellón de la muerte después de estar recluido 17 años por un crimen que, según él, no cometió, y Franky Carrillo, quien en el 2011 fue puesto en libertad después de pasar 19 años en prisión por un asesinato que tampoco cometió.

“Conocí en la cárcel a varias personas que me revelaron sus más íntimos pensamientos, entre ellos su inocencia de los crímenes que les imputaban y aun así fueron ejecutados”, dijo Meléndez mencionando algunos nombres.

Según lo aclara Stauring, la pena de muerte va en contra de la dignidad humana y no garantiza justicia, porque tanto puede condenar a un culpable como a un inocente. Es por eso que los Obispos de California han apoyado el proceso desde su inicio con la recolección de firmas, hasta el punto en que la propuesta de ley pase a los votantes, quienes deberán decidir si pasa o no la iniciativa que aboliría la pena capital en el estado de California.

Quitar la pena de muerte, según coinciden el representante de la Arquidiócesis de Los Ángeles, el senador Gil Cedillo y el actor James Olmos, trae más ventajas que beneficios para la comunidad, ya que la misma ahorraría al estado mil millones de dólares en cinco años, sin poner en libertad a ningún prisionero, “fondos que pueden invertirse en las escuelas de nuestros hijos, servicios para ancianos y discapacitados y en las agencias policiales para mantener seguras a nuestras comunidades”, opinan.

“Desde que se instituyó la pena de muerte hemos gastado 13 millones de dólares en California por mantener este sistema de operación que ha fallado”, afirma Stauring.

“En la década de los años 70 se ejecutaron solamente a 13 personas en California. Son más de 700 personas que han sido condenadas a muerte, pero el promedio para llevar a cabo la sentencia es de 25 años entre apelaciones, con el fin de evitar esa sentencia”, justifica. De manera que la mayoría de los sentenciados a muerte en California terminan muriendo de vejez o enfermedad”, agrega el representante de la Arquidiócesis de Los Ángeles.

De acuerdo con Stauring, los Obispos católicos, en particular el Arzobispo José Gomez, han acentuado su posición a favor de la “Proposición 34” porque además de que es la posición moral de la Iglesia en contra de la pena de muerte, se ha comprobado que de ninguna manera viene a disminuir la delincuencia o ha persuadir a los delincuentes.

El actor Olmos, quien confesó que en un tiempo estuvo a favor de la pena de muerte, hizo un llamado a los votantes, especialmente a los latinos, para que voten Sí a la Proposición 34. “Si me quieren, si les he dado algo en mi manera de ser de activista, si les he ayudado en sus escuelas e Iglesias, éste es el día para agradecérmelo votando a favor de la 34”, dijo.

Por su parte, el senador Gil Cedillo dijo que votar SÍ a la referida propuesta de ley es una obligación moral, especialmente de los inmigrantes latinos por quienes él ha luchado en defensa de sus derechos.

De ser aprobada en la votación de noviembre, se haría efectiva al día siguiente de la elección y se aplicaría retroactivamente a todos los que esperan la aplicación de la sentencia. VN

¿POR QUÉ ES TAN COSTOSA LA PENA DE MUERTE?

Razón #1: Los juicios en los casos que involucran la pena de muerte requieren de un proceso legal prolongado. El proceso incluye: dos juicios, uno regular y uno para la “imposición de la pena”; honorarios y acciones legales, investigadores expertos, doble defensa, jurado y juez especial.

Razón #2: El albergue de los condenados a muerte es generalmente más costoso que el de un prisionero condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, porque se requieren medidas de seguridad más numerosas y caras para alojar y supervisar a los prisioneros sentenciados a muerte.

Razón #3: En cada caso que involucra la pena de muerte se interponen apelaciones obligatorias que pueden ser interminables. Esto incluye “apelaciones directas y extensas objeciones legales en las cortes estatales y federales”.

PRINCIPAL CONTENIDO DE LA PROPUESTA DE LEY 34

• La Proposición 34 garantiza que personas inocentes no sean ejecutadas al reemplazar la defectuosa pena de muerte de California con una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

• Exige que los asesinos convictos trabajen y paguen una indemnización al fondo de compensación de sus víctimas.

• Votar “SÍ en la 34” ahorraría mil millones de dólares en cinco años, fondos desperdiciados en la actualidad en la pena de muerte. Otorga $100 millones a las agencias policiales para la resolución de casos de violación y homicidios.

• La justicia requiere que se indemnice a los sobrevivientes de las víctimas de asesinato. Debemos asegurar que cada sobreviviente sea tratado con el respeto y justicia que merecen. SÍ en la 34 asegura que asesinos y violadores sean capturados, enjuiciados y castigados con todo el peso de la ley.