
CHOCOLATE CON SABOR A ESCLAVITUD
Por ALICIA MORANDI
(fOTO: (Photo: Make Chocolate Fair U.K.))
En muchas partes del mundo se celebra en este mes el Día del Trabajo con el fin de homenajear a quienes se dignifican a través de él. Pero hay millones de trabajadores que laboran en condiciones que pisotean su dignidad. Y peor aún, un gran porcentaje son menores de edad.
Por ejemplo, ¿sabía que ese rico chocolate que saborea con tanto placer podría ser resultado del trabajo de niños en condición de esclavos?
La mayoría del cacao que se usa en el mundo para elaborar el chocolate es resultado de la labor de millones de niños y adolescentes mayormente de los países africanos Ghana y Côte d’Ivoire, de acuerdo a un reporte del Departamento de Trabajo de Estados Unidos (USDOL). Sus investigaciones muestran que más de 1.75 millones de menores han trabajado en los cultivos de cacao de esos dos países de África en la última década. Esta faena puede ser altamente riesgosa, particularmente para quienes están a una edad en la que se desarrolla la capacidad física, mental y psicológica. Ellos laboran largas horas, levantando pesadas cargas y usando herramientas peligrosas. Podrían asimismo estar expuestos a pesticidas esparcidas sobre esos cultivos, y a los incendios que se provocan como práctica para limpiar los campos.
La investigación de USDOL encontró que “más de la mitad de los niños que trabajan en granjas de cacao han resultado heridos”.
“Nosotros como consumidores nos volvemos cómplices de esta explotación laboral al comprar y usar productos hechos en condiciones laborales terribles, como ocurre por ejemplo con el chocolate. Hay adultos que fuerzan a pequeños de incluso 5 años en adelante a recoger el cacao con una paga mínima o sin ninguna paga”, dijo María Elena Perales, de “Southern California Partners for Global Justice” -una coalición de comunidades religiosas, organizaciones y agencias que se unen para educar, proteger y tomar medidas acerca de situaciones injustas que no reconocen los derechos humanos y la dignidad, como lo son el tráfico humano para explotación sexual, y el trabajo forzado. Esta coalición quiere crear conciencia de este crimen.
“Mayormente el cultivo de cacao ocurre en África, pero también en algunos países de Centroamérica donde la situación de explotación es similar. Si al comprar ciertas marcas de chocolate no averiguamos de dónde provienen y cómo es la cadena de suministro, estamos contribuyendo de alguna manera a esta esclavitud”, dijo Perales, una de los miembros de “Southern California Partners for Global Justice” que recientemente colaboró en el “Simposio sobre el chocolate”, en la Iglesia St. Mark en la Ciudad de Venice. El objetivo fue crear conciencia acerca de la cosecha del chocolate; las implicaciones sociales que existen en lo que compramos y consumimos, y sobre el significado del comercio justo y sus productos.
“Estamos pidiéndole a la comunidad que se informe de dónde proviene el chocolate; si éste se comercializa en un tratado comercial justo, o si proviene de compañías que se rehúsan a esto. Tenemos que ver que la mercadería que compramos tenga logos que digan ‘Fair Trade’ (comercio justo), que significa que se está produciendo sin explotar a sus trabajadores. Esto no sólo incluye chocolate, también café, ropa… tenemos que fijarnos en la etiqueta de dónde proceden. Hay sitios web donde uno puede preguntarle a las compañías dónde y cómo lo producen”, agregó Perales.
La entrevistada comentó que aunque es entendible que queremos sacar el mayor provecho posible a nuestro dinero, a la misma vez tenemos la responsabilidad de cuestionar de dónde provienen los productos que consumimos.
“Como consumidores tenemos poder, por eso hay que informarse más y tomar acción. Podemos lograr juntos una diferencia en la vida de millones que están sufriendo. Elijamos un producto que respete los derechos de los trabajadores, aunque cueste un poco más caro. Es una manera de contribuir a mejorar la vida de campesinos y manufactureros”.
Peralta señaló que si bien en Los Ángeles no hay cultivos de cacao, es una de las ciudades donde también existe la esclavitud laboral en algunas industrias, y la explotación sexual a través del tráfico humano.
La Hermana Kathleen Bryant y el Padre Bob Juárez lideran este movimiento de crear conciencia de esta situación de explotación y combatirla. VN
DE INTERÉS
• www.ethicalconsumer.org
• www.fairtradeusa.org
• www.dol.gov/ilab/reports/pdf/TVPRA (lista de mercadería producida por menores de edad)
• www.fairlabor.org/affiliates/participating-companies (compañías que no practican explotación laboral)
• www.humanthreadcampaign.org/ (para tomar acción)
PONGA SU ‘GRANITO DE ARENA’
Si sospecha que alguien es víctima de explotación sexual o laboral, llame a la línea nacional gratuita y confidencial: 1 (888) 3737 888.
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