¿QUÉ ES EVANGELIZAR? Y ¿QUIÉNES LO HACEN?

Posted On marzo 05, 2019 0 Comment

(fOTO: Las distintas realidades del mundo requieren la práctica de la religión aplicada, la cual consiste en entablar amistad con las personas, tal y como lo hizo Jesús, cuya misión fue construir el Reino de amor de Dios entre las personas. / VOA).

Por PADRE JIM CLARKE, Ph.D.

Evangelizar es compartir la fe y dar testimonio de la presencia de Dios en nuestra vida donde quiera que estemos

¿Quién soy? ¿Cuál es el propósito de mi vida? ¿Qué pasa después de la muerte? ¿Dónde están las respuestas? Estas son algunas de las preguntas esenciales sobre la vida que se hacen muchas personas. También son las preguntas sobre la fe. ¿Recuerda la historia bíblica de la mujer samaritana en el pozo (Juan 4, 4-42)?

Esta es la historia de una mujer que era rechazada por su comunidad debido a que era adúltera. Un desconocido se encuentra con ella en el pozo de la comunidad, bajo el sol del mediodía. Él le pide un vaso de agua. Esta solicitud es seguida por una serie de preguntas más, las cuales provocan una conversión en la mujer. Cuando llegan los amigos del hombre al pozo, ella se va a compartir “las buenas nuevas” con su comunidad. Las palabras de ella son reveladoras para sus vecinos: “¡Él me dijo todo lo que hice! ¿No podría ser éste el Mesías? ” ¡La forma en que ella compartió sus buenas nuevas cambió a toda la comunidad!

Compartir nuestra fe (evangelización) no es avergonzar o regañar a otra persona ni es enlistar un sinnúmero de versículos bíblicos. Evangelizar debería ser una conversación de corazón a corazón, entre dos seres humanos, sobre las realidades de la vida. La evangelización es un proceso de dos vías en el que ambas personas son tocadas por el encuentro.

Con este proceso, ayudamos a otros a que sepan que Dios los ama; es decir, a que escuchen claramente la Buena Nueva de que Dios está siempre y en todas partes con nosotros y para nosotros, especialmente en los tiempos difíciles y oscuros de nuestra vida. A menudo queremos apresurarnos para llegar a la meta final del proceso, explicando la fe a alguien más o asustándola para que vuelva a la práctica de su fe. Ninguna de estas estrategias funciona muy bien, ni han sido modeladas por Jesús.

Lugares para evangelizer

La evangelización ocurre a través del testimonio personal de nuestras vidas y clara proclamación de la Buena Nueva. Evangelizar a una persona a la vez es lo mejor, mediante una bienvenida hospitalaria y una invitación explícita a los demás. A menudo, esto se hace invitando a alguien a un evento específico como un retiro, una actividad comunitaria, un estudio bíblico o un servicio de adoración.

Nosotros intentamos multiplicar el tiempo disponible para conversar con los demás. Por esta razón, vamos a los lugares donde se reúne la gente: el trabajo, centro comercial, los clubes, vecindarios o escuelas. Las distintas realidades del mundo requieren la práctica de la religión aplicada, la cual consiste en entablar amistad con las personas, tal y como lo hizo Jesús, cuya misión fue construir el Reino de amor de Dios entre las personas. ¿Cómo puede usted hacer esto?

A continuación, doy un ejemplo. Supongamos que un compañero de trabajo comienza a hablar sobre lo difícil que es su matrimonio y usted se identifica con varias de las frustraciones que él está compartiendo. Primero, escuche desde su corazón. Cuando él haya terminado su historia de dolor, hable desde su corazón y comparta con él cómo usted ha enfrentado una situación similar. Segundo, al compartir, vaya directo al punto de su testimonio, por ejemplo, diciendo esto: una vez me sentí muy frustrada porque no era feliz en mi matrimonio, entonces oré y le pedí a Dios que me mostrara qué hacer. Luego, Dios me recordó algo muy simple que podía hacer para iniciar el cambio en mí (y posiblemente en mi esposo). Ahora estoy mucho más feliz en mi matrimonio y conmigo misma.

Son las historias e imágenes las que hacen que las personas cambien, no los conceptos o las presiones. El siguiente paso en el proceso de evangelización es invitarlo a familiarizarse con la historia de Jesús. ¿Qué ha oído hablar de Él? ¿Cuál es su impresión acerca de Jesús? Quizás pueda compartir su historia favorita sobre Jesús o una experiencia que haya tenido con Él. Tal vez se sienta motivado a orar con ellos o por ellos en su necesidad particular. Finalmente, invítelos a su comunidad de fe, ya sea a un grupo grande o a uno pequeño. Es recomendable que se acompañe a los invitados al menos durante las primeras reuniones, para que puedan sentirse bienvenidos y cómodos en este nuevo entorno.

Sería conveniente que pregunte en su parroquia si hay talleres o clases de matrimonio, crianza de los hijos, oración y espiritualidad, dinero o duelo, entre otros.

Caminos de conversion

Para terminar, relataré una maravillosa historia. Había una vez una familia filipina que se mudó al lado de un supremacista blanco. Él estaba en un largo proceso de recuperación tras haber sufrido un grave accidente de motocicleta. Le había hecho saber a todos que despreciaba a cualquiera que no fuera como él. Una mañana, María, la recién llegada al vecindario, mientras oraba se sintió motivada a hacer unas galletas para compartir con su vecino. Cuando fue a entregar las galletas, su vecino la recibió con un sinfín de malas palabras, pero ella colocó las galletas en el porche delantero y se fue. Cada día, el Señor la inspiró a que preparara algo para este hombre. Después de dos meses, él finalmente abrió la puerta y le habló civilizadamente, preguntándole por qué estaba haciendo esto por él. Ella respondió: “Jesús”. Este encuentro se convirtió en la introducción básica de él al catolicismo. ¡Un año después fue bautizado, confirmado y recibido en la celebración eucarística! Así es como las personas se convierten, ¡asistiéndolas en sus necesidades! VN

Fe y acción

Estas son algunas prácticas individuales que puede hacer para compartir las Buenas Nuevas: