TEMEN QUE HONDUREÑA EN ESTADO DE COMA SEA ENVIADA A SU PAÍS

La familia de Sonia del Cid Iscoa, quien se encuentra en estado de coma, tiene hasta el jueves para reunir 20.000 dólares o de lo contrario el hospital donde se encuentra la enviará a Honduras, pese a estar en EEUU amparada por un TPS.

Así lo determinó un juez en el condado Maricopa el pasado viernes para evitar que el hospital la envíe de regreso a su país de origen.

La inmigrante hondureña está en coma desde que dio a luz de forma prematura el pasado 20 de abril en el Centro Médico y Hospital San José en la ciudad de Phoenix, a su sexto hijo, una bebé que se encuentra aún en incubadora.

John Curtin, abogado de la familia, dijo hoy a Efe que el hospital está tratando de hacer algo que el gobierno de los Estados Unidos, no puede: enviarla a Honduras, ya que Iscoa se encuentra legalmente en el país gracias al Estatus de Protección Temporal (TPS) que otorga el gobierno a inmigrantes de países víctimas de desastres o conflictos.

“Yo entiendo la preocupación del hospital por no recibir su pago, pero no pueden ‘deportarla’ enviándola de regreso a su país”, enfatizó el abogado.

Representantes del hospital argumentan que le han dado toda la ayuda necesaria, pero ahora requiere de un cuidado a largo plazo que -aseguran- no pueden proporcionarle, por lo que han hecho acuerdos con un hospital en Honduras que atiende a personas de bajos recursos económicos para que se encargue del caso.

Iscoa no tiene seguro médico que cubra un cuidado de largo plazo y solamente se encuentra protegida por un programa de asistencia pública que cubre los gastos de emergencia en caso de vida o muerte.

El juez dio hasta el jueves plazo a la familia para reunir el dinero que servirá como garantía para que la inmigrante continué recibiendo cuidado médico en Arizona.

“Estamos haciendo todo lo posible para recaudar el dinero, este fin de semana llevamos a cabo un lavado de autos, pero tenemos mucho miedo de que no sea suficiente”, dijo a Efe Leticia Franco, cuñada de Iscoa.

La inmigrante hondureña, quien ha vivido durante los últimos 17 años con su familia en Phoenix, obtuvo el TPS en 1990 y el mismo vence en 2009.

El Gobierno de Estados Unidos concedió el amparo a inmigrantes indocumentados de Nicaragua y Honduras a principios de 1999 por razones humanitarias, tras el paso del devastador huracán Mitch, entre octubre y noviembre de 1998. VN

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