RECUERDOS DEL CARDENAL ROGELIO MAHONY DE SUS ENCUENTROS CON JUAN PABLO II

El 28 de junio de 1991 el Papa Juan Pablo II nombra Cardenal al Arzobispo de Los Angeles Rogelio Mahony, en Roma.

“Hace ya casi 20 años… Fue una gran sorpresa para mí. Recibí una llamada de su secretario a eso de las dos o tres de la mañana, avisándome que en 3 días el Papa iba a nombrarme Miembro del Colegio de Cardenales. Lo había conocido en 1978 cuando fue elegido Papa. Yo estaba en Roma durante ese tiempo de su elección. Me quedé durante la elección e inauguración de Juan Pablo II. Y después nos vimos muchas veces más porque pertenecía a muchas Congregaciones y Concilios”.

EN SU PRIMERA VISITA A LOS ÁNGELES…

“Cuando él visitó Los Ángeles por primera vez, en septiembre de 1987, tuvimos previamente casi un año de preparación para su vista, para que él estuviera aquí 48 horas para celebrar dos Misas grandes, una en el Coliseo y la segunda en el Estadio de los Dodgers. Me parece que en esa ocasión realizamos12 eventos especiales con el Papa.

Nuestro Comité planeó una ruta para que él pudiera pasar por vecindarios diferentes y comenzamos en la avenida Western y pasamos por el vecindario de afroamericanos y después de centroamericanos y mexicanos, por el Chinatown, Little Tokio y llegamos a la entonces Catedral Santa Vibiana. En la ruta había mucha gente saludándolo, miles y miles”.

“Recuerdo que llegó en la mañana al aeropuerto de Los Ángeles y esa tarde celebró la primera misa en el Coliseo, y después regresamos a la Catedral. El plan era volver a su cuarto y después ir a una cena. Pero fuimos directamente a la cena. Salimos del ascensor y cuando llegamos al comedor, no había nadie, ni cocineros, ni meseros estaban presentes. Entramos y le dije que iba a llamar al personal para que sirvieran la cena, pero cuando regresé el Papa y su secretario se estaban sirviendo una sopa. Fue un momento especial para mí porque me di cuenta que él estaba disfrutando la oportunidad de descansar, de relajarse como si estuviera en su casa. Era como un amigo visitando la casa; fue un recuerdo muy precioso para mí.

“Otro momento que recuerdo vividamente de esa visita fue en Universal City cuando tuvo una reunión con los jóvenes de otros estados, todos conectados por televisión, y en cada lugar ellos pudieron hacerle una pregunta o darle comentarios al Papa. En esa ocasión estaba el jovén Tony Meléndez que no tiene brazos pero toca la guitarra con sus pies y canta. El Papa quedó emocionado por este artista, y fue a saludarlo. Para eso tuvo que caminar una gran distancia, y el servicio de seguridad no estaba nada contento con esto. Pero llegó a Tony y lo abrazó”.

EN SUS VISITAS A ROMA…

“Como persona Juan Pablo II fue un hombre muy cariñoso, humilde. Estaba muy interesado en la Arquidiócesis de Los Ángeles. Le sorprendió profundamente que aquí tuviéramos Misas en 37 idiomas diferentes. Cuando yo visitaba Roma siempre me comentaba esto: ¡Misa en 37 lenguas! Recordaba la tremenda diversidad étnica de Los Ángeles”. Cuando nos reuníamos, él tenía muchas preguntas de la realidad pastoral de aquí; de cómo las parroquias pueden manejar grupos de tanta diversidad étnica, lenguas, culturas. La mayoría del tiempo hablábamos de estos puntos”.

“Él fue un buen pastor, muy cariñoso, muy amigo, muy hombre. Con una espiritualidad muy profunda”. VN

Share