LAS CONSECUENCIAS DE MANEJAR BAJO LA INFLUENCIA DEL ALCOHOL

Los accidentes automovilísticos son la causa principal de las muertes de los estadounidenses de 4 a 34 años de edad. En el año 2000, se mataron un total de 41,821 personas en choques de tráfico en los Estados Unidos y el alcohol estuvo relacionado en 16,653 (40%) de esas fatalidades.

Cuando alguien maneja bajo la influencia del alcohol o drogas su cerebro no está funcionando. Su prudencia no existe. Desafortunadamente, al día siguiente no se puede retroceder el tiempo cuando uno se da de cuenta que está en la cárcel, su mejor amigo murió o usted acaba de perder ambas piernas y jamás volverá a caminar.

Vida Nueva conversó con Luis Losada. Su experiencia puede ser la historia de cientos de conductores latinos que piensan que pueden manejar en estado de embriaguez y estar por encima de la ley sin pensar en las consecuencias.

LA HISTORIA DE LUIS

Luis Losada siempre fue un hombre responsable y trabajador, que tomaba solamente en ocasiones especiales. La estabilidad de la familia lo llevaron a refugiarse en el alcohol sin advertir las tremendas consecuencias que le traería a su vida.

Un día la policía lo paró y después que le hicieran las pruebas de alcohol, los resultados arrojaron que tenía casi un 16% de contenido de alcohol en la sangre. Ahí comenzaron los problemas legales que se extendieron por más de 3 meses.

“Las leyes ahora son mucho más estrictas, comentó Luis. Una sola cerveza te da el 0,08% de alcohol en la sangre. Ese es el límite de la ley en California. Las personas no se dan cuentan que hasta te pueden mandar a la cárcel por manejar borracho. El primer DUI (manejar bajo la influencia de alcohol, según las siglas en inglés) conlleva una multa de miles de dólores”.

“Según mi experiencia, el día que la patrulla me paró me pidieron salir del carro, caminar en una línea, tocarme la punta de la nariz con los dedos, y cuando se dieron cuenta que estaba bastante embriagado me hicieron la prueba con la maquinita donde soplas. Te la hacen 3 veces. Yo sabía que estaba mal, así que decidí cooperar con la policía. Siempre es la mejor opción. Automáticamente se llevaron mi carro y me arrestaron. En la estación de policía me hicieron otro examen y quedé preso como un delincuente. Me sacaron fotos, me tomaron las huellas digitales. Fue una experiencia muy desagradable. Estuve preso por 14 horas”. agregó Luis.

“Al salir de la estación, me quitaron la licencia de conducir y me dieron un permiso de conducir por un mes. Este procedimiento está en dependencia del delito. Uno tiene 7 días para aplicar a un permiso especial con el DMV. Hay que tener en cuenta que la corte y el DMV son instituciones independientes. Después de los 30 días el DMV te cancela la licencia”.

“Después viene el proceso judicial”, continuó con el relato. “A los dos meses tuve que presentarme antes un juez. Es difícil ganar un caso de DUI. Es importante tener un abogado o un defensor público, porque son las personas que conocen las reglas y hacen que el juez respete tus derechos. Uno solo no puede hacer nada. A mí me dieron una licencia restringida, horas de labor comunitaria y $348 a pagar. Además, tengo que asistir a Alcohólicos Anónimos y participar durante seis meses en un programa llamado “First Time DUI Ofender” el cual me costó $900. Si después te agarran en un segundo DUI pueden arrestarte por hasta 2 meses y estar a prueba entre 2 a 5 años. El tercer DUI es ya considerado una felonía y puedes estar preso hasta por un año. Es importante decir que a cada persona se le aplica la ley de manera diferente”.

Al reflexionar sobre el impacto que esta experiencia tuvo en su vida comenta: “Este problema me costó mucho dinero, tiempo y quedé marcado por diez años. Sin embargo esta experiencia me ayudó muchísimo. Pienso que fue una bendición de Dios. Yo estaba emocionalmente muy mal. Les agradezco mucho a los oficiales que me pararon. Ellos evitaron que hubiera tenido un accidente u otras consecuencias mayores. Como le digo a todo el mundo, me salvó mi vida”.

LAS LEYES DE CALIFORNIA

En 1990, se implementó en California el límite de concentración de alcohol en la sangre (BAC) del 0.08% y las leyes administrativas de suspensión de licencia, medidas que han demostrado ser efectivas en la reducción del índice de accidentes que involucran alcohol.

Según la información publicada en la página electrónica del DMV cuando una persona es arrestada por manejar bajo la influencia se requiere por ley que el oficial remita inmediatamente al DMV una copia del Aviso de Suspensión o Revocación de cualquier licencia de manejar que se tome en posesión junto con un reporte juramentado. Usted tiene el derecho de solicitar una audiencia del DMV dentro de un período de 10 días a partir del momento en que se recibe la Orden de Suspensión o Revocación.

Por regla general los oficiales confiscarán su licencia al momento del arresto. Se le devolverá su licencia de conducir al finalizar la suspensión o revocación, siempre que pague $125 al DMV y presente prueba de responsabilidad financiera. Si se determina que no existe ninguna base para la suspensión o revocación, se le expedirá o devolverá su licencia de manejo.

La suspensión o revocación de su licencia es independiente de cualquier encarcelamiento, multa u otra pena criminal impuestas en la Corte, si lo condenan por una ofensa por manejar bajo la influencia del alcohol y/o drogas. VN

¿CÓMO AFECTA EL ALCOHOL AL CUERPO?

• Limitar su campo de visión

• Reducir su percepción de la profundidad

• Disminuir su habilidad de ver en la oscuridad

• Aumentar su sensibilidad a los reflejos en un plazo de tiempo más largo para que sus ojos se reajusten a los reflejos

• Reducción de la noción del peligro

• Volverse demasiado confiado e imprudente

• Dificultad al tomar decisiones

• Reducción del equilibrio

• Reflejos más lentos

• Razonamiento impedido

Fuente: www.dmv.org