HISPANOS TIENEN POCAS OPORTUNIDADES DE COMPARTIR CON SU FAMILIA

Los padres de familia hispanos de bajos ingresos y menores niveles de educación tienen menos oportunidades de compartir en actividades hogareñas, que los de otros grupos étnicos o de ingresos más elevados, según un estudio.

De acuerdo con el reporte del Centro de Investigaciones Políticas y Económicas publicado, los padres de familia anglosajones tiene más oportunidades de obtener trabajos con horarios diurnos estandarizados que los hispanos o de otros grupos.

El informe destaca que, en todo caso, la familia tradicional de dos padres, en la que la madre permanece en el hogar cuidando a sus hijos, es hoy poco más que un referente de otra época.

Señala que en los últimos tiempos ha habido un aumento del número de núcleos familiares a cargo de uno sólo de los progenitores y también de aquellos en los que ambos están obligados a trabajar.

A esta situación se suma el hecho de que muchos padres deben trabajar jornadas extendidas u horarios irregulares, que incluyen las noches y las madrugadas, limitando así el tiempo de compartir en actividades familiares y lo que es peor, de involucrarse efectivamente en el desarrollo y la educación de sus hijos.

“Los padres son lo más importante en la vida de los jóvenes”, destacó Beth Perry, trabajadora social y directora del Programa de Adolescentes del Centro de Atención Materno Infantil Mary’s Center en Washington.

Insistió en que es indispensable que los gobiernos generen políticas sociales que le den alternativas a los jóvenes y amplíen los presupuestos para programas especiales dedicados a los niños y a la juventud.

“Es una realidad que los padres tiene que trabajar, y no pueden estar todo el tiempo con los hijos, pero si los niños y los jóvenes tienen alternativas sanas van a escoger bien”, afirmó la especialista aclarando que es indispensable generar opciones que alejen a los menores de las tentaciones de la calle.

Muchas parejas de bajos recursos económicos que no pueden costear el valor de una niñera o una institución especializada en el cuidado de los pequeños, se ven obligadas a distribuir sus horarios de trabajo de tal forma que en una jornada uno de los padres se encarga de su cuidado y en la siguiente el otro.

Esta alternativa, nuevamente disminuye las posibilidades de compartir en familia, pero se está convirtiendo en la única opción de aquellos que debido a su limitado nivel de conocimientos deben aceptar cualquier trabajo, a cualquier hora, con tal de sobrevivir y asegurar la supervivencia de los suyos.

“Muchos de nosotros soñamos con darle a nuestros hijos lo que no tuvimos en nuestros países”, resaltó Maribel Juárez, psicóloga y coordinadora de alcance comunitario del Concejo Nacional Latino de prevención con sede en Washington.

De acuerdo con Juárez, muchas familias hispanas se ocupan de llenar “a toda costa” las necesidades materiales de sus hijos, dejando en segundo plano, por ignorancia o por falta de espacio, el tiempo que le dedican a sus hijos, lo que constituye un grave error.

“El tiempo es el mejor regalo que les podemos dar a nuestros hijos”, destacó la psicóloga insistiendo en que los horarios extendidos y la ausencia física de los padres esta generando consecuencias lamentables en la juventud hispana.

“Los padres están perdiendo el control”, indico Juárez para quien es de vital importancia que los padres encuentren la forma de equilibrar sus prioridades y le dediquen mas tiempo a la comunicación con sus hijos.

El estudio insiste en la importancia de generar alternativas reales para las familias trabajadoras y desarrollar políticas sociales, que abran espacios de convivencia en los que sea posible que los padres encuentren un balance entre sus obligaciones laborales y sus deberes familiares. VN