ESCUELAS CATÓLICAS OFRECEN CURSOS DE VERANO PARA SUPLIR RECORTES EN LOS ANGELES

Ante la falta de oportunidades educativas en el verano por los recortes realizados en el distrito escolar de Los Ángeles, la Archidiócesis de L.A. aceptará alumnos de LAUSD en los cursos vacacionales de las escuelas católicas privadas.

La medida anunciada esta semana por el cardenal Rogelio Mahony, arzobispo de Los Ángeles, busca dar una alternativa a los más de 225.000 estudiantes del Distrito Escolar Unificado de L.A. (LAUSD), que se han visto afectados por los recortes.

“No puedo dejar mis niños desatendidos y por eso apliqué a unas clases de verano que ofrecen en una escuela católica”, explicó Esperanza Martín, residente de Long Beach y madre de un niño y una niña de 10 y 7 años, respectivamente.

Aunque no le han dado una respuesta definitiva, Martín aplicó para una beca que le reduciría en forma importante el costo del curso.

“Necesito que me ayuden con el pago pero, como sea, no puedo dejar de trabajar para cuidar a los niños durante las vacaciones”, aseguró esta madre soltera de 32 años.

Aunque no todas las escuelas católicas ofrecen cursos de verano “pues ellos toman sus propias decisiones”, Pat Livingston, superintendente de escuelas elementales de la Archidiócesis angelina, explicó los alcances de la decisión.

“Algunas escuelas ofrecen cursos de matemáticas e inglés y algunas otras tienen el programa de ‘Enriquecimiento Total’ que incluyen actividades académicas y recreativas en el verano”, dijo.

Livingston recomienda a los padres de estudiantes de escuelas públicas del distrito que se comuniquen con las escuelas católicas que funcionan en sus áreas para conocer los cursos de verano se ofrecen y si éstos atienden las necesidades de sus hijos.

Con ese propósito el padre Sal Pilato, superintendente de las escuelas secundarias de la Archidiócesis y Livingston, han elaborado una lista de las escuelas que ofrecen cursos de verano o actividades extraescolares que se puede consultar en el sitio www.archdiocese.la.

“Estamos muy interesados en trabajar con los niños y trabajar con los padres para ayudarlos a resolver esta situación”, destacó Livingston al referirse a la suspensión de los cursos de verano en LAUSD, el segundo distrito escolar más grande el país.

Sobre el costo de estos cursos, la superintendente señaló que “aunque hay que pagar una suma, ésta es bastante razonable”.

Igualmente explicó que -dependiendo de las circunstancias de cada escuela- los padres de familia que necesiten ayuda económica con el pago de los cursos de verano, pueden solicitar a la rectoría que considere esa posibilidad.

“Los directores de nuestras escuelas católicas están dispuestos a trabajar con los padres de familia y pueden negociar con ellos para ayudarlos”, resaltó la educadora señalando que no obstante, por las circunstancias económicas difíciles, “todos estamos pasando por un mal momento”.

De las 224 escuelas católicas elementales que la Archidiócesis tiene en L.A., la superintendente anunció que un poco más de la mitad ofrecerán cursos de verano y/o actividades complementarias para los estudiantes en este periodo y “casi todas las preparatorias los ofrecerán”.

“Queremos que los padres de familia sepan que realmente simpatizamos con la idea de que busquen nuestros programas de escuela de verano”, destacó la educadora. VA

Share