EL SERVICIO DE LOS LAICOS ES INDISPENSABLE

El Arzobispo José Gomez y el Obispo Auxiliar Robert Barron en la Catedral Nuestra Señora de los Ángeles junto a algunos de los que recibieron certificación y/o envío al ahondar en su fe católica. Fotografía de Victor Alemán.

Catequistas reciben certificado para servir a la Iglesia católica de la Arquidiócesis angelina

Por Giovanni O. Pérez

“El apostolado de los laicos, que surge de su misma vocación cristiana, nunca puede faltar en la Iglesia”. Esta frase, escrita en noviembre de 1965 en el Decreto Sobre el Apostolado de los Laicos de los Documentos del Concilio Vaticano II, hizo eco vigorosamente en la presencia de centenares de ministros laicos que recibieron certificados y comisiones para servir al pueblo de Dios en toda la Arquidiócesis de Los Ángeles.

La Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles estuvo totalmente abarrotada, y un espíritu de alegría y compromiso se desprendía del corazón de aquellos que recibieron la bendición y el envío.

El pasado 13 de septiembre, el Arzobispo José H. Gomez envió a catequistas, agentes de pastoral juvenil, líderes de grupos de oración y animadores de estudios bíblicos a que fueran a desempeñar la tarea de evangelizar en las distintas comunidades parroquiales de los condados de Los Ángeles, Ventura y Santa Bárbara. El arzobispo recordó a los comisionados que deben responder a la pregunta: “¿Quién es Jesús?” en su vida diaria, para poder así ser fieles apóstoles del gran Maestro. Exhortó a los enviados a servir con dedicación, teniendo siempre presente la importancia de estar íntimamente conectados con Jesús. “Como enviados”, el arzobispo recomienda, “lean los Evangelios diariamente”. Y con buen sentido del humor, continuó: “Los evangelios son la página Facebook de Jesús”.

El evento es un “Servicio de Oración y Envío” que se celebra anualmente en la Catedral de Nuestra Señora Los Ángeles. Este evento está organizado por la Oficina arquidiocesana de Educación Religiosa, la cual ofrece programas de formación y entrenamiento para las personas que desean profundizar en su propia fe o prepararse para servir eficazmente en los diferentes ministerios de sus parroquias particulares. Esta formación y educación continua para adultos servidores es el corazón de su misión.

Cómo ser catequista

Absolutamente todos los que recibieron certificación y/o envío dedicaron tiempo con el fin de crecer en su relación personal con Dios y ahondar en sus conocimientos de nuestra fe católica. Muchas de las clases se ofrecieron semanalmente durante las noches y otras en fines de semana completos.

La catequista Edith Clara de la Parroquia St. Ferdinand expresó que el sacrificio que hizo de dedicar su tiempo, le devuelve una alegría que nunca antes había tenido. Con un título universitario en Animación computarizada, Edith recibió la Certificación básica de catequistas con especialización en Catequesis Primaria. “He aprendido mucho sobre la Iglesia, la Biblia y lo que es ser católica; lo que es tener fe. También tuve que hacer práctica dando clases de catequesis para que me indicaran las cosas que podía mejorar y enseñarle más efectivamente a la niñez”, dijo.

Para obtener dicha certificación cursó tres fases. En la primera recibió formación básica en Teología general; en la segunda completó la Especialización de Catequesis Primaria, que le otorgó métodos básicos de enseñanza para la niñez. Y finalmente hizo la práctica que consiste en ser evaluada por dos catequistas certificados y observar como dos catequistas certificados enseñan a los niños. En su vida personal, Edith dice que se ha enriquecido mucho. “He cambiado mi vida. Antes estaba llena de rencor. Esta formación me ha ayudado a mí y a mi familia a ser más comprensivos”.

Por su parte, Flavia Valadez (Parroquia de San José Obrero, Canoga Park) obtuvo un certificado avanzado de catequesis. Ahora está comisionada para la formación de otros catequistas. Además de haber cursado la certificación básica de catequesis, ella finalizó tres años de formación. Dos de ellos en temas más profundos de teología, y uno de práctica enseñándoles a otras personas cómo ser catequistas.

“Antes de mi llamado [a servir] pensaba que Dios era de sólo los domingos. Llegaba tarde a misa y me salía temprano. Pero después de mi encuentro con Jesús reflexioné: ¿Cómo puedo hacer un cambio yo para servir a mi comunidad?”. Ahora que es una Formadora de Catequistas, Valadez desea continuar aprendiendo y creciendo en su fe. Ya ha terminado un año de estudios bíblicos y sabe que el aprender sobre Dios nunca se acaba.

Y hay más

Además de comisionar a catequistas de diferentes niveles, el Arzobispo otorgó comisiones, entre otras, a Animadores Bíblicos. Como es el caso de Oscar Resendis, de Holy Cross en Santa Bárbara, que ahora tiene la capacitación para dirigir estudios bíblicos auspiciados por la Arquidiócesis de Los Ángeles y de acompañar y guiar a futuros animadores que están en la fase de la práctica de su propia formación. No sólo obtiene conocimiento intelectual y académico de las Sagradas Escrituras, “ahora puedo entablar un diálogo de fe y de la biblia con mis hijas”, dijo.

La Oficina de Educación Religiosa ofrece certificados a todas las personas interesadas, particularmente a aquellas que tienen puestos de liderazgo en sus parroquias. El Instituto de Evangelización Pastoral (IPE) capacita a líderes de grupos de oración. Hay un certificado para que líderes puedan dirigir meditación y oración.

Por su parte, la división de Pastoral Juvenil ofrece certificación en liderazgo de jóvenes, mejorar las relaciones humanas, capacitación para hablar en público y áreas que mejoren los métodos para evangelizar más eficazmente.

Hay una bella preocupación en la Oficina de Educación Religiosa, cada año el número de personas que se certifican crece más y más. ¿Qué vamos a ser cuando ya no quepamos en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles? ¡Lindo problema a tener! Por ahora sabemos que la Iglesia continúa vitalizada con el compromiso del laicado. VN

DE INTERÉS

Si desea obtener información sobre cómo usted puede capacitarse, comunicarse al (213) 637-73959, o visite: www.la-archdiocese.org/org/ore.