MÁS DE 40 MIL PERSONAS PARTICIPARON EN EL CONGRESO DE EDUCACIÓN RELIGIOSA

Educadores católicos, catequista, Ministros de pastoral, clérigos y religiosos reunidos desde todo el mundo para el Congreso anual de Educación Religiosa, para proclamar la Buena Nueva de Jesucristo y la libertad de vivir el gozo del discipulado y el amor.

“Dios pone luz en cada copa vacía, dijo la Hermana Edith Pendergast March, al referirse al tema de este año “Avanzando hacia la Libertad”.

Por primera vez, el Congreso –ahora reconocido como un evento internacional– contó con 40 mil participantes de 47 estados, Washington D.C. y muchos diferentes países. Los conferencistas vinieron de países como Irlanda, Inglaterra, El Salvador y México, para presentar 270 sesiones en inglés, español y vietnamés.

El Obispo Gerald Barnes, de San Bernardino, presentó dos talleres a su total capacidad sobre inmigración, y el Cardenal Rogelio Mahony recibió un fuerte aplauso de miles de participantes en la Arena, el 1º. de abril, cuando el sacerdote dominicano Timothy Radcliffe alabó la posición pública del Cardenal en apoyo a una reforma de inmigración más humana.

Sister Edith Pendergast dijo que este año asistieron al Congreso 2,000 personas más que el año pasado. “Yo pienso que la gente tiene hambre de espiritualidad, de aprender más. Especialmente en el área del ministerio laico, la gente quiere realmente estar preparada con habilidades, y también con la visión y algunos recursos para extender la Buena Nueva. Mucha gente dice que viene aquí por las liturgias, porque son muy profundas y están muy bien preparadas y pueden aprender cómo hacer buenos rituales cuando vuelvan a casa, y pienso que es también un tiempo para orar. Yo creo que el espacio sagrado es un atractivo para la gente: otra vez un oasis en medio de todo, para poder pasar algún tiempo con el Santísimo o para escuchar alguna música contemplativa o para caminar el laberinto, o para celebrar el sacramento de la reconciliación. Y también pienso que la visión total está tan bien integrada y tiene tantos diferentes niveles para la espiritualidad de la gente, que ellos pueden probar diferentes lugares y eventos.

El Cardenal Rogelio Mahony dijo en su homilía en español e inglés:

“Este es un evangelio que nos llama a dos cosas: una, ayudar a que cada uno salga de cualquier tumba que haya en nuestro interior, y a desatar a cada uno de las barreras y obstáculos, tales como la del racismo, la murmuración o la envidia, o las otras cosas que pasan en nuestras vidas. Esta es una maravillosa oportunidad para quitar la piedra, para remover todas esas cosas de nuestro medio. Pero la segunda parte puede ser más importante. Y esta es la parte que no está escrita en los evangelios porque Jesús resucitó a Lázaro, no sólo como un signo, sino para enviarlo como un buen discípulo de Jesús, de manera que Jesús, Martha y María pudieran continuar el milagroso trabajo de Jesús en su propio tiempo. Esta me parece que es precisamente la parte de la historia con la que necesitamos quedarnos. Y nosotros necesitamos hacer esto de una manera más heroica, Necesitamos ser cristianos heroicos de una manera nueva”.

Varios participantes en el Congreso expresaron su satisfacción por todas las oportunidades de formación que ofrece el Congreso, así como por la motivación que da para continuar trabajando por la causa de Jesús. Las liturgias merecieron especial mención, por la belleza de todos sus elementos y las novedades que presentan cada año. Este evento anual es una oportunidad para los participantes de compartir los dones recibidos de Dios. VN