Más de 800 indocumentados han sido trasladados de forma voluntaria a México en vuelos comerciales desde la ciudad de Tucson durante los primeros tres días del Programa de Repatriaciones Voluntarias 2009, se informó.
Durante una conferencia de prensa en el Aeropuerto Internacional de Tucson, autoridades estadounidenses dieron a conocer que el programa binacional inició el pasado 22 de agosto y terminará el próximo 28 de septiembre.
Con bolsas de plástico donde llevaban comida y mochilas con sus pertenencias, unos 150 hombres -en su mayoría provenientes de los estados de Puebla y México- fueron repatriados hoy en el segundo vuelo con destino a Ciudad de México.
“Está muy difícil la cruzada, se me acabó el dinero y creo que es mejor regresar”, dijo Manuel Valdez, inmigrante indocumentado momentos antes de que abordara el avión.
Sostuvo que la situación está muy difícil en México, que tenía más de seis meses sin trabajar y por eso decidió “jugársela” cruzando la frontera.
Al ser cuestionado sobre si intentará nuevamente cruzar la frontera Valdez dijo “no estar seguro”.
Varios de sus compañeros de viaje afirmaron haber caminado por el desierto por más de cinco días y haber sido arrestados por la Patrulla Fronteriza durante el fin de semana.
Dos de los hombres dijeron que sí tratarán de cruzar nuevamente la frontera, mientras que otro aseguró “que no vale la pena”.
John Torres, subsecretario de Operaciones de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (ICE), dijo que el programa es un esfuerzo “humanitario” por salvar las vidas de inmigrantes indocumentados que cruzan el desierto de Arizona durante el verano, cuando las temperaturas superan fácilmente los 110 grados Fahrenheit.
Manifestó que este año el inicio del programa se retrasó debido a demoras en las negaciones de los contratos con las líneas aéreas.
En años anteriores el programa comenzó durante el mes de julio.
Desde su establecimiento, en 2004, más de 82.000 mexicanos han participado en el mismo.
Debido al retraso, la repatriación voluntaria de mexicanos tendrá este año un costo de seis millones de dólares. El año pasado el costo fue de 12 millones de dólares.
Torres enfatizó que solamente los inmigrantes indocumentados que no tengan antecedentes criminales podrán participar en esta iniciativa.
Por su parte, Robert Gilbert, jefe de la Patrulla Fronteriza Sector Tucson, dijo que un 10 por ciento de los indocumentados mexicanos que participaron el año pasado en el programa, fueron arrestados nuevamente tratando de cruzar la frontera.
“Para nosotros es muy importante este programa, nos ayuda a salvar vidas y evitar el sufrimiento de familias”, agregó Gilbert.
Durante el presente año fiscal, que inició en octubre pasado, 180 indocumentados han muerto en su intento por cruzar la frontera de Arizona.
El desierto de Arizona es la principal ruta de cruce indocumentado a lo largo de la frontera EEUU-México y de acuerdo con estadísticas del Gobierno federal es aquí donde se arresta a más de 42 por ciento del total de inmigrantes indocumentados anualmente.
Beatriz López Gargallo, cónsul general de México en Nogales, Arizona, dijo que una vez que los inmigrantes indocumentados lleguen a suelo mexicano, serán llevados en autobuses hasta sus lugares de origen sin costo alguno para ellos.
Manifestó que se está poniendo énfasis en aquellas personas más vulnerables como son los menores de edad, mujeres y ancianos.
Alrededor de 20 representantes del gobierno de México entrevistarán a los inmigrantes indocumentados que expresen deseos de regresar de forma voluntaria.
Hasta la fecha, ocho inmigrantes indocumentados han rechazado participar en el programa. VN