ASOSAL Y SU LUCHA PRO INMIGRANTE CUMPLE 25 AÑOS

Por EBER HUEZO

“No ha sido fácil llevar a cabo nuestro trabajo comunitario durante estos 25 años que tenemos de existir como organización, pero gracias a Dios, a nuestros colaboradores y a nuestra comunidad salvadoreña, centroamericana y latina en general, hemos salido y seguiremos adelante ayudando a nuestros inmigrantes”, dice Teresa Tejada, directora ejecutiva de Asociación Salvadoreña (ASOSAL).

ASOSAL nació con ese propósito en 1991. Uno de sus grandes eventos lo organizó ocho años después, desarrollando una campaña de concientización casa por casa para que la gente se involucrara en la lucha por la residencia legal. Ofrecieron charlas de concientización en lugares como Chulavista, San Diego, Riverside, San Bernardino, Palmdale, entre otros, recuerda Tejada.

“Además hemos visto la manera de servir en el área de inmigración, contribuyendo en la lucha para obtener un TPS que permitió a miles de indocumentados centroamericanos residir y trabajar legalmente en Estados Unidos”, agrega.

La ley NACARA es uno de los logros más sobresaliente que resalta Luis Hernández, miembro fundador de ASOSAL, quien asegura que no fue fácil lograrla. Según el entrevistado, costó mucho esfuerzo y sacrificio. Miembros de ASOSAL y otras organizaciones pro inmigrantes tuvieron que realizar en Washington varios movimientos, como un ayuno de 13 días que llamó la atención de la prensa y congresistas sobre la causa de miles de Nicaragua, El Salvador y Guatemala, entre otros países, que buscaban finalmente obtener una residencia permanente.

Fueron siete ayunantes dispuestos a no parar hasta cumplir su objetivo, dice Hernández.

‘…TENEMOS EL MISMO SENTIR DE DAR SIN ESPERAR…’

Además de la lucha exitosa pro inmigrante de ASOSAL, Hernández resalta la ayuda humanitaria que la organización ha realizado durante los últimos 25 años, sobre todo durante los desastres naturales, entre ellos el huracán Mitch y los terremotos de 2001 en El Salvador.

“Realizábamos distintas actividades de recaudación de fondos que servían para enviar juguetes a los niños, útiles escolares a los estudiantes, ropa y víveres a los sectores más pobres del país centroamericano.

“Ayudamos a quien lo necesitaba, sin ver su ideología o credo religioso. Cuando íbamos a dejar la ayuda a El Salvador para el caso de los terremotos en 2001, habían alcaldes que nos decían que ellos se encargarían de repartir la ayuda, pero nunca consentimos hacerlo porque sabíamos la forma de trabajar de ellos”, puntualiza Hernández.

Para ASOSAL la lucha pro inmigrante, el trabajo cultural y la ayuda social debe continuar. “Por eso que los miembros y colaboradores ponen énfasis para que los jóvenes -muchos de ellos sus propios hijos y voluntarios- se involucren en el trabajo social que realiza la organización, y pongan interés en mejorar las condiciones de vida de los inmigrantes en Estados Unidos y nuestros países de origen”, dice María de los Ángeles Orellana, también fundadora de la referida organización.

Asegura que para motivar a los jóvenes además de involucrarlos en Los Ángeles, la organización los lleva todos los años a El Salvador a entregar proyectos como: centros de cómputos, reconstrucción de escuelas y proyectos de ayuda humanitaria, con la idea que mantengan esos lazos con la gente de El Salvador. Además aquí en Los Ángeles se han entregado becas universitarias a jóvenes que demuestran el esmero y deseo de triunfar en este país.

En el área cultural ASOSAL se ha dado a conocer con su escuela de danza; su ballet folklórico que ha participado nacional e internacionalmente. Asimismo, la participación de la banda “Nuestros Ángeles de El Salvador” en el Desfile de las Rosas en 2008 que fue su proyecto más ambicioso.

“Todos tenemos el mismo sentir de dar sin esperar, por lo que nos hemos ganado la confianza y la voluntad de la comunidad”, concluye Armando Romero, presidente de ASOSAL. “Esa actitud nos satisface porque nos da la certeza que hemos hecho las cosas bien y nos hemos ganado su credibilidad, considerándolo un éxito como organización”, agrega.

“Nuestra organización ha tenido altas y bajas, momentos difíciles en la que ha estado a punto desaparecer, pero gracias al empuje de algunos de sus fundadores y de la comunidad hemos salido adelante, realizando un buen trabajo a favor de la gente, sobre todo con la niñez y juventud”, dice Romero. VN

Más información de ASOSAL
(213) 483-1244 o visite: www.asosal.org