ACUSAN A 42 PERSONAS DEL MAYOR FRAUDE EN LA HISTORIA DE MEDI-CAL

Cuarenta y dos personas fueron acusadas de un fraude cercano a los 4,6 millones de dólares -el mayor en la historia- contra Medi-Cal, el seguro de salud que California ofrece a las personas de bajos ingresos económicos.

El anuncio fue hecho por el fiscal federal del distrito central de California, junto con autoridades del FBI y otras agencias del orden que también informaron la detención de 20 de los acusados.

“Creemos que éste es el caso singular más grande presentado en el estado de fraude contra Medi-Cal”, anunció Thomas P. O’Brien, fiscal federal para el Distrito Central de California.

“Los cerca de cuatro docenas de personas asociados con esta cadena de fraude no solamente engañaron a los contribuyentes sino que pusieron en riesgo las vidas de jóvenes a quienes prometieron proteger y cuidar”, agregó O’Brien.

Priscilla Villabroza, una enfermera registrada, identificada como líder del grupo que dirigía la empresa Medcare Plus Home Health Providers de Santa Fe Springs -al sureste de L.A.- se declaró culpable de cinco cargos de fraude en una corte federal el año pasado.

Según la acusación, de agosto de 2004 hasta finales de 2007 Villabroza y otros asociados contrataron personas sin licencia para proveer servicios a pacientes discapacitados de Medi-Cal, facturando los servicios como si hubieran sido prestados por enfermeros registrados.

Los pacientes eran visitados en sus casas o en sus escuelas por personas sin licencia que les suministraban servicios de enfermería incluso administración de medicamentos, ajuste de ventiladores y alimentación por tubos.

Algunos padres y pacientes reportan a las autoridades que los “enfermeros” carecían de las habilidades básicas. En un caso, uno de los acusados no pudo volver a colocar un tubo de traqueotomía que se había zafado del cuello de uno de los jóvenes pacientes. En otra situación, una “enfermera” simplemente se fue del sitio al no tener la capacidad de resolver una situación médica que se presentó.

En la acusación se incluye a Susan Bendigo, enfermera certificada y asistente de Villabroza, quien fue acusada al año anterior y huyó del país durante las investigaciones.

Villabroza, Bendigo y otros supervisores dieron instrucciones específicas a los contratados para que mintieran ante los padres o responsables de los niños, ocultando su falta de preparación y en algunos casos asegurando que eran enfermeros licenciados.

Los acusados enfrentan los cargos de conspiración para cometer fraude a servicios de salud y fraude mismo, ambos delitos que pueden tener cada uno sentencia máxima de 10 años en prisión federal.

Medi-Cal ofrece seguro de salud y cuidado a 6,5 millones de personas en el estado. VN

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