POLICÍA DE LOS ÁNGELES INVESTIGA EL USO DE LA FUERZA EN MARCHAS DE 1 DE MAYO

El jefe de la Policía de Los Ángeles, William J. Bratton, confirmó hoy que investigará si hubo un abuso de la fuerza cuando sus agentes dispersaron anoche una de las manifestaciones hispanas en favor de una reforma migratoria.

El incidente tuvo lugar en las proximidades del parque MacArthur, cerca del consulado de México en Los Ángeles, cuando la policía hizo uso de sus porras y disparó balas de goma en contra de los manifestantes.

En rueda de prensa, Bratton indicó que fue un “incidente desafortunado” y describió a los manifestantes como “pacíficos”.

El jefe policial también citó a unos “50 a 100 agitadores” como los provocadores que tiraron botellas de plástico y piedras contra los agentes, aunque puntualizó que a su parecer estos individuos no estaban relacionados con los manifestantes.

Bratton no hizo ningún intento de justificar la respuesta de sus hombres y corroboró el deseo del alcalde Antonio Villaraigosa de investigar este incidente “en profundidad y con rapidez”.

Parafraseando las palabras de Villaraigosa, Bratton recordó que “siempre es desagradable ver una carga policial, incluso cuando es necesaria”.

Pero también pidió a los residentes que no “generalicen” el comportamiento de la policía.

Como alcalde en funciones ante la ausencia de Villaraigosa -de viaje oficial en El Salvador-, el concejal Eric Garcetti subrayó que se realizarán tres investigaciones, dos dentro del departamento y otra independiente de las que se esperan respuestas en 30 días.

La manifestación en la que ocurrieron los enfrentamientos formaba parte de las marchas que se celebraron en todo el país con motivo del 1 de mayo en favor de una reforma migratoria.

Durante todo el día cientos de personas se manifestaron pacíficamente en Chicago, Nueva York, Detroit, Phoenix y Los Ángeles y consiguieron congregar a unas 200.000 personas en todo el país, una cifra muy por debajo a los 650.000 que marcharon el pasado año sólo en Los Ángeles.

Según confirmó Villaraigosa desde El Salvador, en Los Ángeles se congregaron aproximadamente 35.000 personas a lo largo de toda la jornada, un día que definió como “pacífico y positivo” hasta su “triste” final.

Durante la acción policial no se produjo ninguna detención aunque fueron varios los manifestantes y periodistas que necesitaron asistencia médica, en su mayor parte de heridas leves, así como 15 agentes de la policía antidisturbios. VN

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