‘ESTAMOS AQUÍ POR LA PROVIDENCIA DE DIOS’

(fOTO: El principal orador en español, Arzobispo Gustavo García Siller (centro), Misionero del Espíritu Santo, ofreció la conferencia ‘Confía’ durante el Congreso Arquidiocesano de Educación Religiosa 2017).

El Arzobispo Gustavo García Siller entregó un mensaje de fe y compromiso, en conferencia del Congreso de Educación Religiosa

Por GIVOANNI PÉREZ CAMPOS

En un marco de vitalidad y alegría, el Congreso Arquidiocesano de Educación Religiosa 2017 despertó a su segundo día el sábado 25 de febrero. Temprano por la mañana los participantes fueron tomando asiento para la oración, que concluyó con el bello canto “Somos el Cuerpo de Cristo” compuesto por el salvadoreño Jaime Cortez. Éste nos recuerda que, como miembros de Su Cuerpo, estamos llamados a detener todo tipo de discriminación, parar el abuso y auxiliar al necesitado.

El canto “Somos el Cuerpo de Cristo” que cerró la oración de la mañana, simultáneamente abrió la conferencia de apertura que, por primera vez en la historia de este magno evento, se presentó en español, y se tituló igual que el lema “Confía”. El Arzobispo de San Antonio, Texas -Gustavo García Siller-, Misionero del Espíritu Santo y originario de San Luis Potosí, México, se dirigió a una concurrencia que aproximaba unas 700 almas.

Lleno de energía y con una evidente pasión, Gustavo García Siller llevó su mensaje de fe y esperanza exhortando a la acción y al testimonio. Interrumpido en varias ocasiones por el aplauso de la asamblea, el arzobispo reiteraba de distintas formas que “nadie debe ser excluido”.

“Estamos aquí por la providencia de Dios”, dijo Siller. “No importa las razones por las que tú crees que estás aquí. Estamos aquí, porque Dios así lo quiere”.

A pesar de estar viviendo en tiempos que causan miedo y ansiedad ante las amenazas presentes debido a nuestra realidad actual, refiriéndose al clima político que atraviesa Estados Unidos con el nuevo presidente Donald Trump, “estamos en la búsqueda de hacer un mundo mejor, y por eso estamos en el lugar preciso”. Siller animó a su pueblo recordando las palabras de Jesús en el Evangelio de Mateo: “Donde haya dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ustedes”.

Frente al estrado de donde el Arzobispo de San Antonio exponía su discurso, estaba erigida una simple cruz de madera -la “Cruz del V Encuentro”- que fue bendecida por el Papa Francisco para animar a la Iglesia de Estados Unidos en su nuevo proceso para discernir formas en las que la Iglesia en este país pueda responder mejor a la presencia de los hispanos/latinos, y potenciar formas en que éstos respondan como discípulos misioneros al llamado de la Nueva Evangelización, sirviendo a toda la Iglesia. (Para más información sobre el V Encuentro visite la página oficial http://vencuentro.org/es.)

Esa cruz presente es el símbolo de la presencia de Cristo que camina y se solidariza con su pueblo, “formándoles y enviándoles el Espíritu Santo para dotarles de los dones necesarios”, dijo el arzobispo. Exhortando a la concurrencia a ser testigos del Evangelio, recordó las palabras del Santo Francisco de Asís: “Prediquen el Evangelio, y si es necesario, usen las palabras”. Con enérgica voz y convencimiento anunció que necesitamos más testigos que predicadores, y que los actos en la vida cotidiana deben ser el Evangelio evidente que los otros puedan ver.

Al concluir su mensaje, muchos de los reunidos se acercaron al arzobispo para saludarlo y tomarse fotos con él. Entre ellos se encontraba la Directora de Formación de la Fe en N. S. de la Asunción en Claremont, California, María Elena Cardeñas. Su reacción reflejaba emoción e inspiración, sobre todo porque su mensaje es un llamado a la acción.

“Le conozco desde sus inicios” comentaba Cardeñas. “Él le dio la bendición a mi abuelita cuando ella todavía vivía, y tuve la oportunidad de ir a México para su primera misa, inmediatamente después de haberse ordenado como sacerdote. Es un hombre con mucha dedicación para con su pueblo, su ministerio y para la Iglesia en general”, comentó.

La pareja Guadalupe y Juan Álvarez, amigos personales y miembros de la Parroquia San Justín, en Anaheim, California, también se acercaron al arzobispo llenos de alegría. “Tuvo la amabilidad de oficiar la misa de nuestras bodas de plata en Cotija, Michoacán”. Sobre su mensaje de esa mañana, la señora Guadalupe se lleva el mensaje de no ser católicos solamente de nombre, sino de vivir el Evangelio en la cotidianidad de la vida diaria. “Personalmente”, dijo su esposo, “debemos tener fe de que vamos a salir adelante, y ser solidarios para con todos, unidos en estos momentos que atravesamos”.

Los participantes del Congreso se dirigieron a sus conferencias subsiguientes llenos del llamado a confiar en la presencia de Dios en sus corazones, y animados a luchar por un mundo de paz, justicia y solidaridad. VN

(*Giovanni Pérez Campos es Director Asociado de la Oficina de Educación Religiosa y Coordinador de la Catequesis para la Primaria).

CINCO ACTITUDES QUE REFLEJAN EL ESPÍRITU DEL CRISTIANO

En su discurso, el Arzobispo Gustavo García Siller hizo hincapié en la urgencia de solidarizarse con los más necesitados, especialmente en estos tiempos. En ese espíritu, y como cristiano que confía en Dios y se solidariza con sus hermanas y hermanos, el religioso propone lo siguiente:

1. Salir al encuentro del necesitado.

2. Entrar en diálogo para escuchar las necesidades presentes.

3. Hacer espacio para la inclusión. Adoptar la manera de ver cómo Dios ve: cada uno es mi hermano, mi hermana.

4. Acompañar, y ante la aparente impotencia ofrecer lágrimas solidarias, recordando las palabras del Santo Padre de “Ser capaces de llorar”.

5. Y finalmente discernir bajo el Espíritu del amor qué pasos tomar para la acción solidaria.